Los responsables de dañar la Geoda se colaron por un pozo y lo subieron a redes
El Ayuntamiento tranquiliza sobre los daños en la Geoda: “Ya está como siempre”
No fue un acto vandálico fruto del azar o de una noche de borrachera, sino que el hombre y la mujer que están acusados de entrar en la Geoda de Pulpí, dañándola, en la madrugada del pasado 1 de enero, tenían claro que iban a entrar en la joya natural de la provincia saltándose todas las normas para después poder hacerlo público en las redes sociales. Y lo consiguieron con el posterior daño ocasionado a la Geoda.
Para adentrarse en el recientemente declarado Monumento Natural de Andalucía, los dos acusados, que ya han sido detenidos por la Guardia Civil, trazaron un plan y, tras introducirse en el recinto por un vallado que rompieron, se valieron de cuerdas de las que se usan para la espeleología para deslizarse por un pozo, poniendo en riesgo su propia vida, y adentrarse en la mina que les conduciría hasta su objetivo.
Lo que no sabía la pareja de inconscientes aventureros es que sus pasos dentro del espacio natural estaban siendo monitorizados en todo momento por las cámaras del recinto, que permitieron su rápida identificación. Aunque los dos detenidos se lo pusieron todo más fácil a los responsables del Ayuntamiento de Pulpí y a los investigadores de la Benemérita, pues se jactaron de ello en las redes sociales, donde presumieron de su deleznable hazaña: colarse en un monumento natural al que solo se puede acceder con el equipamiento profesional y específico para ello.
Y al introducirse sin ninguna medida de seguridad en el espectacular y singular 'agujero' de cristales de yeso que conforma una maravilla única en el mundo, el hombre y la mujer lo único que estaban haciendo era causar unos daños de gran valor, pues rayaron una parte considerable de los cristales. Unos hechos que ocurrieron el pasado sábado 1 de enero y que ya el lunes, día 3, los responsables municipales los tenían localizados y pudieron identificar, y posteriormente denunciar ante la Guardia Civil, a los responsables del indignante hecho, un hombre y una mujer vecinos de la provincia pero no del municipio.
"Tenemos muchas medidas para que esto no ocurra y pudimos pillarlos rápidamente y tenemos todo registrado en vídeos y fotos. Además, lo pusieron fácil porque lo publicaron todo en las redes sociales. Lo que han hecho es un hecho muy indignante porque se han saltado todas las normas poniendo en riesgo una joya de nuestro patrimonio que ahora ha sido declarado Monumento Natural de Andalucía", detalla el concejal de Cultura del Ayuntamiento de Pulpí, Juan Bautista, quien defiende que los daños ocasionados en los cristales ya están siendo reparados: "Al entrar sin el material y el equipamiento adecuado rayaron algunos de los cristales de yeso, que son muy frágiles, pero los expertos de la Universidad de Almería ya han estado trabajando para que ahora mismo vuelvan a estar como estaban. La Geoda ya está como siempre y los que vengan a verla van a seguir disfrutándola como antes".
De este modo, señalan desde el Ayuntamiento, ahora se encuentra "en perfectas condiciones", aunque remarcan: "Ha sufrido una intrusión absolutamente intolerable que sin duda ha provocado la alteración puntual en cristales del suelo de la geoda, y que actualmente se encuentran en proceso de restauración. Además, el microclima de la geoda sufrió una subida significativa de los niveles de temperatura, CO2 y humedad relativa durante la estancia de estas dos personas, que necesitó de varias de horas de recuperación según los datos obtenidos en tiempo real por la Universidad de Almería".
A pesar de que se ha 'cazado' a los responsables y de que se ha podido subsanar el daño causado en la Geoda, desde el Ayuntamiento de Pulpí han incrementado la seguridad del recinto con el sellado de todo el vallado así como con un mayor número de cámaras. Todo, para evitar que vuelva a ocurrir un atentado contra un espacio que, tras su declaración como Monumento Natural, cuenta con una mayor protección y si alguien a partir de ahora se atreviera a hacer lo mismo se enfrentaría a una pena alta. "Tuvieron suerte encima porque aún no estaba declarado, porque se podrían enfrentar a cuatro años de cárcel, pero lo que han hecho ha sido reírse de todos los que amamos la naturaleza y en especial nuestra Geoda", concluye Bautista.
Javier Romero
Responsable de Informativos de SER Almería desde 2005.