El abogado de la auditoría externa encargada por la Iglesia para investigar los abusos: "Temo reticencias, son muchos obispos e igual alguno piensa que no es adecuado"

Madrid

Hoy la Iglesia ha concretado cómo va a ser la auditoría externa que va a poner en marcha para investigar los abusos sexuales en el seno de la institución. Se ha encargado a un despacho de abogados que lleva la firma 'Cremades y Calvo-Sotelo' y en Hora 25 hablamos con su presidente.

El objetivo

-"Estamos hablando de un problema muy grave y muy antiguo. Vamos a tratar de encontrar la verdad, qué paso y cuál es el ámbito y el alcance de esa herida y después la reparación y recuperación de las víctimas"

¿Por dónde van a empezar?

-"Por entregar a la sociedad un mapa histórico de qué sucedió, para ver el alcance. También qué sintieron y sienten las víctimas y finalmente ver qué podemos hacer para que no ocurra otra vez"

¿Existe algún modelo previo?

-"Es un proceso que comienza en el año 2000 en la diócesis de Boston y ha tenido un reflejo en distintos países, especialmente en Alemania y Francia que son los modelos más recientes. Es un esfuerzo de responsabilidad, también de la Iglesia y de todos nosotros como sociedad. Esto ha pasado en España y no ha pasado en otro lugar, tenemos que empezar sanando lo que ha ocurrido aquí, pero vamos a tener que hacer una reflexión de cómo proteger a los menores de manera integral. Hay que entender cómo se extiende el abuso de poder. Esta investigación solo se circunscribe en el seno de la Iglesia. El problema no está solo en resolver ahora en la institución, hay que proteger a los menores"

Dudas sobre su independencia

-"Esto solo se va a resolver con el ejercicio de esta responsabilidad, pero entiendo las dudas y solo puedo responder con mi compromiso personal (...) La clave es cómo se afronte esta investigación. El problema creo que no radica en lo que uno cree, sino en lo que uno hace"

¿Cómo va a ser el contacto con las víctimas?

-"Directo. Está muy definido por los protocolos de las Naciones Unidas. Con un respeto escrupuloso, pero con atención inmediata y directa"

La proyección estadística de las víctimas

-"De lo que se trata es de presentar un diagnóstico certero de lo que ha pasado y una terapia adecuada"

El compromiso de la Iglesia

-"Tengo el compromiso, lo que no tengo es la certeza. Ahora tenemos que llegar a las diócesis y ver si abren los archivos. Tengo el compromiso al máximo nivel de la Conferencia Episcopal. Al final tendrá que ser cada obispo el que decida seguir esa política de libros abiertos.

¿Teme reticencias?

-"Sí (...) Estamos hablando de muchos obispos y temo que alguno piense que esto no es adecuado. Dios quiera que esto se haga bien y sobre todo que las víctimas reciban una atención real

El resto de investigaciones

-"Son investigaciones necesarias, oportunas y legítimas. Vamos a aportar lo que esté en nuestra mano. Toda nuestra información estará disponible y además habrá una colaboración absoluta (...) Ojalá un año sea suficiente. Tenemos una experiencia previa y ojalá podamos hacerlo en este tiempo. Trabajarán 18 personas inicialmente, pero realmente es una tarea nueva, insólita. Son juristas del despacho inicialmente, pero iremos incorporando perfiles de tipo psicológico y moral (...) Una víctima puede ir a la Fiscalía, a la diócesis, incluso a el diario 'El País' a clamar justicia. Si otro encuentra otro cauce más adecuado puede contactarme por correo.

¿Habrá indemnizaciones?

-"Me imagino que las habrá. Tiene que haber una reparación (...) Hemos pensado que esto no es un asesoramiento ni trabajo para la Iglesia. El despacho lo hará como una labor probono y tendrá que asumir los costes la propia Iglesia. Nos la estamos jugando, los profesionales que hemos puesto nuestro nombre y nuestro crédito aquí vamos a intentar que sea de verdad y que sea un trabajo bien hecho"