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Condenados a 34 años de cárcel los acusados por el asesinato de un empresario vasco en Zaragoza

A los dos acusados del caso Badoo se les condenará por asesinato, robo con violencia y estafa

Javier Cebollada (EFE)

Bilbao

La Audiencia Nacional ha condenado con penas que suman 34 años de cárcel a los dos acusados miembros de la banda de Badoo por el asesinato de un empresario de Getxo en septiembre de 2019 en Pedrola, Zaragoza. El jurado encargado del caso ya emitió su veredicto el pasado 18 de febrero, en el que consideraba culpable a la pareja, formada por una mujer y un hombre residentes en Pedrola, del robo con violencia y asesinato con las agravantes añadidas de ensañamiento, alevosía y evitar el descubrimiento del delito perpetrado.

Además, les consideraron culpables de los delitos de detención ilegal y de estafa que les imputaban la fiscalía y la acusación particular en nombre de la familia en relación a los hechos registrados. La Audiencia de Zaragoza, a tenor de este veredicto, ha dictado sentencia e impone a cada uno de los miembros de la banda 25 años de prisión por asesinato, 6 por robo con violencia y 3 por estafa, y les condena a pagar solidariamente una indemnización de 185.618 al hijo de la víctima; de 56.625 a su madre y la misma cantidad a su padre y de 19.400 a cada uno de sus dos hermanos.

El jurado consideró probado, a tenor de las pruebas testificales y periciales, que la víctima fue atraída hasta un punto de la carretera de acceso a Luceni (Zaragoza) por un anuncio de Badoo que le ofrecía relaciones sexuales con la acusada, y que fue asaltado poco después de llegar a la zona. Destacaron, asimismo, que la víctima fue objeto de numerosos golpes y torturas en una nave que utilizaban de vivienda en Luceni hasta que finalmente fue transportado por los acusados hasta una zona descampada del municipio de Pedrola, donde fue enterrado vivo. El cadáver fue hallado por la Guardia Civil veinte días después de su salida de Getxo y entretanto la pareja extrajo 1.800 euros la tarjeta de la víctima en varios cajeros automáticos y vendió su coche.