La Cultural alimenta su fe

León

La escalada de la Cultural no precisa del juego. Se basa en victorias, cuatro en cinco jornadas, tras cumplir el trámite de la pasada semana y hacer los deberes frente al colista. En unas horas pocos se acordarán del cómo y sí del qué cuando miren la tabla en busca de razones para creer. Se habrá apagado ya el amago de revuelta en las gradas contra el juego de los de Curro Torres, que sufrieron ante un Tudelano superior en muchas fases o parcelas del juego, pero no en las áreas. Vive en la exigencia absoluta el equipo leonés y a este triunfo le saldrán detractores. ¿Es justo?

El primer atisbo de rareza fue la vestimenta. En tiempos de marketing, todo vale, incluso enfundar a la Cultural una prenda negra para saltar al Reino. Lo hizo con Castañeda y Gaztañaga en perjuicio de Amelibia, renqueante, y Moreno, el damnificado de la llegada del "Comandante". Escobar regresó a la zaga, aunque acabó en la medular porque el Tudelano exigió jugar todas las cartas. Se estrelló contra Sotres y palideció cerca de ambas porterías.

El trepidante arranque dio vuelo a las condiciones de Álvaro Juan, de nuevo carrilero. Por allí gestó el peligro la Cultural, que aprovechó los deslices de los navarros. Grosero el de Cavafe en la esquina de su campo, impetuoso Álvaro Juan en la presión, generoso Vitoria y definitivo Buenacasa, concreto en el remate. El maño es una amalgama de colores, alegres por su talento y oscuros en la irregularidad y las lesiones. Volverá a la enfermería. Con la noche encarrilada, la Cultural pulsó el 'stop'. Frenó el ritmo y perdió el control. Pagó su conformismo (¿o es que no hay más?). Sotres, que venía de tirar de reflejos a cabezazo cercano de Alonso, no llegó a su palo izquierdo cuando Gualda, que avanzó por una autopista, chutó desde una posición escorada cerca del área. Se le atrancó la máquina a Curro Torres y ni siquiera un taconazo de Vitoria, a centro de Álvaro Juan, la pudo arrancar.

El tedio se apoderó del juego y desde ahí se trasladó al respetable. A la Cultural le costaba un mundo trenzar por dentro, a pesar de la movilidad de Aarón, destacado aún sin el gol. Lo intentó desde el centro del campo de nuevo o de tijera, en un lance que Álvaro Juan, muy presente, acabó rematando alto. Un 'flash' en medio del control tudelano, que la tuvo para provocar otro incendio en el Reino. Apagaron el fuego Sotres, enorme en el remate de Bassirou, y Laerte, errático en la posterior culminación. Perdonó el brasileño y el farolillo ya intuía su pena. Se acordaron de Empis en el banquillo y, en su primera intervención, le puso el balón en la frente de Vitoria en medio del boquete de la zaga. Los hombres de negro no dudaron en defender su renta, en meter más defensas, en sortear los centímetros de Caballero y en preparar la puntilla. Pudo ser Percan, pero fue Solís y su magnífico libre directo. El Reino ya canta los goles de Solís...como culturalista.

CULTURAL 3: Dani Sotres; Fran Cruz, Escobar, Castañeda; Álvaro Juan (Mangana, 82'), Gaztañaga (Amelibia, 64'), Sierra, Marcos González (Empis, 64'); Aarón, Buenacasa (Solís, 52'); Vitoria (Percan, 82').

CD TUDELANO 1: Pellegrino; Iribarren, Aveldaño, Cavafe (Iván López, 61'), Luna; Laerte, Faber (Aitor, 61'), Gualda, Aranzabe (Marín, 68'); Alonso (Caballero, 75') y Bassirou.

ÁRBITRO: Monter Solans (Aragón). Amonestó a Escobar, Faber, Cavafe, Alonso e Iribarren

GOLES: 1-0- Buenacasa (minuto 10), 1-1- Gualda (minuto 26), 2-1- Vitoria (minuto 66), 3-1- Solís (minuto 90).

INCIDENCIAS: 3000 espectadores presenciaron el partido en el Reino de León