"Tenemos a nuestras familias y amigos allí y lo peor es que no nos ayuda nadie"

Toledo

Con gritos de "No queremos la guerra, queremos la paz", "Putin asesino" y "Ucrania quiere paz" decenas de personas han condenado este sábado en Toledo la invasión rusa en Ucrania y el conflicto bélico que vive el país. La Red de Mujeres en Negro contra la Guerra convocaba este mediodía una concentración en la Plaza de Zocodover a la que han asistido numerosos ucranianos que residen en la ciudad desde hace años y que han portado banderas de su país y carteles de rechazo en los que se podían leer frases como "Stop agresión rusa en Ucrania", "Toledo con Ucrania" o "Stop war".

Visiblemente emocionados, los ucranianos y ucranianas que viven en Toledo han condenado la invasión rusa y han explicado angustiados la situación que atraviesan sus familiares y amigos en el país. "Tenemos a nuestras familias y amigos allí y lo peor es que no nos ayuda nadie. Ningún país nos ayudó realmente con apoyo militar, no nos dejaron entrar en la OTAN. Es increíble que en 2022 pasen estas cosas tan injustas", lamentaba Kateryna, una joven ucraniana cuya madre y amigos viven a ochenta kilómetros de Kiev. "Todos mis amigos están desde ayer en búnkeres", decía sin apenas contener las lágrimas.

Otros, como Andri, en Toledo desde el año 2009, denunciaba la agresión rusa asegurando que Putin "quiere montar un imperio". Su madre, con permiso de residencia en España, se marchó a Ucrania hace un mes para visitar a sus familiares y ahora no puede regresar. Luva, residente en Toledo desde hace diez años, explicaba, mientras, como su hija y su nieta, que en un primer momento intentaron salir de Ucrania, han decidido finalmente quedarse porque la niña, de cuatro años, no quería separarse de su padre, decidido a permanecer en el país para defenderlo de las tropas rusas.

Sujetando una de las pancartas, Lesya se encomendaba a la fortaleza del pueblo ucraniano, a pesar de la inferioridad armamentística respecto a las tropas rusas. “Queremos que nos proteja la OTAN, la Unión Europea, Estados Unidos", añadía. "Putin quiere volver a la situación de antes, instaurar de nuevo quince repúblicas, pero eso ya no puede ser", afirmaba otra mujer, preocupada por lo que le pueda ocurrir a su hijo, que al igual que el resto de hombres de entre 18 y 60 años están obligados a quedarse en el país para combatir.

"Putin quiere volver a la situación de antes, instaurar de nuevo quince repúblicas, pero eso ya no puede ser", afirmaba otra mujer, preocupada por lo que le pueda ocurrir a su hijo, integrante de las fuerzas armadas ucranianas. Otros expresaban su incredulidad porque, a pesar de las amenazas, nunca pensaron que esta situación fuera a llegar. "Tenemos mucho miedo todos, estamos preguntando constantemente por el móvil. Mis abuelos están en Ivano-Frankivsk, donde ya han bombardeado el aeropuerto", confesaba Valeria, una niña que ha acudido a la concentración junto a su hermana y su madre.