Una pequeña Ucrania en la Plaza del Pilar

Zaragoza

La plaza de Pilar de Zaragoza era - ayer, sábado, por la tarde - una pequeña Ucrania, con banderas azules y amarillas y lazos en las cazadoras y en las solapas. La inquietud y la ansiedad por no saber qué va a pasar inunda sus miradas y sus palabras, las de Olga, Iván, Elena, Alexander, Carmen y Yuri... y de tantos otros.

Piden libertad para Ucrania y ayuda para su país, desde un pequeño rincón en el que intentan buscar una vida mejor y ayudar a sus compatriotas, entre tristeza, lágrimas por sus familias que están escondidas o que intentan salir del país o ir a zonas más seguras, pero también orgullo de la resistencia del ejército ucraniano ante el avance de la invasión rusa.

Así lo siente Iván. Tiene 18 años y ha nacido en España. Es hijo de Olga, que vino a España, buscando una vida mejor, hace 19 años. Ahora están pendientes de su familia, que viven en una zona cercana a Rumanía.

Olga sale de la conversación para abrazar a Elena, que vive aquí desde hace 22 años. Su hijo y su nuera han tenido que dejar su piso de Kiev, porque el edificio ha sido marcado, y están en el metro. Intentan huir hacia el oeste.

Entre gritos de "Putin, asesino" y "No a la guerra", avanza la tarde en la Plaza del Pilar.

En otro punto de la concentración, Alexander, de 21 años, está con su madre de acogida, Carmen. Viven en Ateca. Alexander estudia un grado superior de desarrollo aplicaciones multiplataforma, y recuerda que esta invasión no es de ahora: remonta su mirada a la crisis de la península de Crimea de 2014.

Parte de su familia ha huido a Polonia y sus amigos o están escondidos o están en el frente. Su apoyo aquí, Carmen.

Del sur de Ucrania procede Yuri; lleva 20 años en Zaragoza. Está pendiente de sus padres, escondidos en el sótano de una zona que está siendo bombardeada. Cuando hay calma, le envían mensajes para contar su situación. Con su hermana, en Kiev, la comunicación es más complicada. Ella ha dejado su vivienda y vive en el metro y hoy es el cumpleaños de su sobrino, 16 años.

Yuri regenta una tienda de productos típicos de Ucrania en el barrio de Delicias, y es un punto de encuentro de esta comunidad. A partir de la semana que viene, van a recoger ayuda para enviarla al Ejército y sus compatriotas.

Suena el himno de Ucrania, que envuelve esta concentración convocada por la Asociación de Residentes Ucranianos en Aragón.