Defender la paz no sirve cuando hay guerra
Defender la paz es facilón y estéril
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"La línea roja" de Matías Vallés (01/03/22)
Escucho la convocatoria seguramente bienintencionada de un populoso ayuntamiento balear, que llama a un acto “en defensa de la paz”.
Bienvenida sea la paz cuando la tienes, pero si ha estallado la guerra debes resolver antes un problema fundamental.
Defender la paz no sirve de nada cuando hay guerra.
Supongamos que un ciudadano asiste al acto “en defensa de la paz” llevando una pancarta donde se lee “Pido la paz y viva Putin”.
En efecto, sería cuando menos impropio, pero la invocación al déspota no entraría en contradicción con la abstracta convocatoria.
Es decir, quienes llaman a actos en pro de la paz pretenden que sobreentendamos que se movilizan contra la agresión intolerable de Putin a Ucrania, pero sin que se note.
Dado que en Mallorca se ha registrado el primer acto de guerra fuera de Ucrania, hay que preguntar muy claramente a los tibios si querían que el marinero ucraniano hundiera el yate de su patrón y armador ruso en todos los sentidos.
Defender la paz es facilón y estéril.
Prefiero el grito valiente de un deportista muy querido por todos y residente en Mallorca.
Sebastian Vettel fue el primero en dejar claro que no correría en Rusia y que Putin es un loco peligroso.
La paz viene después.




