La dependencia del cereal de Ucrania agrava la situación de los agricultores locales

Burgos

Alrededor de 300 agricultores y ganaderos de Burgos pertenecientes a la Unión de Campesinos de Castilla y León se han manifestado este mediodía por las principales calles de la capital burgalesa para denunciar el elevado aumento de los costes de producción, solicitar una serie de ayudas fiscales y una PAC más ajustada a las necesidades de los campesinos españoles.

Acompañados de unos 40 tractores han realizado sendas paradas en la Junta de Castilla y León y la subdelegación del Gobierno para hacer entrega de un comunicado con sus reivindicaciones. Susana Pardo, presidenta de la Unión de Campesinos de Burgos, aseguraba que “los costes de producción actuales, como la subida de un 280% en el precio del abono, un 380% en los gastos de electricidad y el aumento del precio del gasóleo, han absorbido los beneficios generados por el campo durante la pasada campaña”.

José Manuel de las Heras, coordinador estatal de la Unión de Uniones de Campesinos, presenta también en la movilización, incidía también en la acuciante sequía actual como otro de los contratiempos que el sector agrario y ganadero se está encontrando, y que igualmente requiere de ayudas para paliarlo.

El coordinador estatal de la Unión de Campesinos ha confirmado igualmente la celebración de una concentración nacional ante el Ministerio de Agricultura prevista para el próximo martes 15 de marzo, al tiempo que no se atrevía a valorar cómo puede afectar el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania al coste del cereal, ya que ahora dejará de llegar a España el procedente desde estos dos países.

El cambio de la definición de ‘Agricultor Activo’ que actualmente contempla el Gobierno en la nueva Política Agraria Comunitaria, es otra de las medidas que plantea la Unión de Campesinos para que así se beneficien de las ayudas aquellos ganaderos y agricultores que tengan perfectamente regulada su situación fiscal y sanitaria.