La joven arandina que trabaja para Vogue, Nike o H&M

Aranda de Duero

La Ribera del Duero está repleta de talento. Lo hemos comprobado en reiteradas ocasiones, y esta es una más. Hoy el nombre es en clave femenina. Y no es otro que el de Paula Haro. No ha llegado a cumplir un cuarto de siglo y ya tiene un currículum increíble. Se ha convertido en Directora de Arte, hace escenografía, y recientemente ha estado trabajando con la prestigiosa revista Vogue. "Para mí ha sido un sueño cumplido", explica, añadiendo que "fue algo bastante repentino, yo acabé el máster el año pasado y unos meses después mandé muchos mails a directores de arte que admiraba, como una especie de trabajo de investigación, y una de ellas era Cristina Ramos, que es directora de arte y lleva como 10 años trabajando en esto, y me hizo una entrevista y me cogió como asistente; fue mi tercer trabajo con ella, porque antes hice otras dos campañas".

¿Qué es la escenografía?

Haro, que reside en Barcelona pero no olvida sus raíces arandinas, es consciente de que "soy afortunada" aunque reconoce que "he trabajado muy duro", pero dice que no es muy normal "conseguir un trabajo y que sea este, con cosas tan importantes". Sobre su papel de escenografía explica que "el director de arte es el que busca el sitio perfecto en el que grabar una película por ejemplo". "Luego también se construye en platós si se busca algo específico, pero es como una especie de diseño de interiores pero que luego se puede quitar. Se hace en publicidad, moda o teatro; se construye todo en un día o dos, luego hay varios días de rodaje, y al acabar hay como unas cuantas horas de desmontaje, y ese es el proceso", especifica.

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¿En qué se basó su trabajo con Vogue?

"Yo fui la asistente de arte, adjunta de Cristina como directora de arte. Pero en un trabajo de tanto nivel, la cosa es que ellos suelen tener varios proyectos a la vez, entonces la mayor parte del trabajo la hacemos los asistentes porque ellos llevan la comunicación con las productoras. Básicamente lo que hice fue el diseño del escenario, en un plató en Madrid. Tuve que hacer los bocetos, me encargué de diseñar la paleta de colores -todo con la supervisión de Cristina- y escogí los muebles. En las fotos solo salían dos sillas pero llevábamos muchas más. El césped también nos encargamos nosotros de llamar a viveros, que nos lo llevaran, los claveles rojos...", resume.

¿En qué está ahora?

"Lo último que he hecho es una campaña de H&M que tuve hace dos semanas para redes sociales. Dentro de una semana tengo otra campaña suya en Mallorca. Antes de esto hice otra campaña en Nike que saldrá en marzo en España y en abril en Estados Unidos", explica, siendo risueña respecto a que 'solo se codea con la élite'. Pero en su horizonte, sus ideas son diversas, porque preguntada por su objetivo, expresa que a sus retos e ilusiones pueden añadirse nuevas cuestiones. "No me gusta pensar en el futuro, no me sale, en este momento no tengo ningún objetivo sino que cojo con los brazos abiertos todo lo que viene, pero no sé lo que estaré haciendo en unos años, porque a nivel profesional y de satisfacción todos estos trabajos me están viniendo muy bien. El cine era lo que yo pretendía hacer cuando salí del máster, que de hecho orientado a ello, pero al encontrarme con Cristina me metí por ahí. Puede que sí acabe como directora de arte en cine, porque es algo que dura más; en publicidad es todo mucho más fugaz", asevera Paula, que estudió en las Dominicas y amplió su formación en el IES Vela Zanetti.

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Al respecto "recuerdo de esa época que se me abrió un mundo; de tener una clase de plástica pasé a tener tres asignaturas de artes, fue un gran cambio, y además estaba rodeada de gente que tenía los mismos intereses que yo", pero afirma que ahora en esta nueva profesión, este trabajo "es muy sacrificado, y solo vivo para trabajar".

Pero a pesar de la dificultad que lleve o que llegue, Paula seguirá ganándose un hueco en el mercado, demostrando que el arte se tiene o se busca, pero que con ilusión y esfuerzo pueden cruzarse las metas marcadas incluso antes de tiempo. Y aunque lejos de su tierra, seguirá siempre pendiente de ella, y orgullosa de las raíces que le han ayudado a ser lo que hoy en día es, y lo que el día de mañana seguirá siendo: una arandina repleta de éxito.