El ministro de Exteriores ruso afirma que una tercera guerra mundial sería "nuclear y devastadora"
El ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, ha asegurado este miércoles que el presidente estadounidense, Joe Biden, sabe que la única alternativa a las sanciones contra Rusia es una tercera guerra mundial y que sería "una guerra nuclear devastadora"
El ministro de Exteriores ruso, Serguei Lavrov, aseguró este miércoles que el presidente estadounidense, Joe Biden, sabe que la única alternativa a las sanciones contra Rusia es una Tercera Guerra Mundial y que sería "una guerra nuclear devastadora", en declaraciones la televisión catarí Al Jazeera.
Biden "tiene experiencia y sabe que no hay alternativa a las sanciones, sino la guerra mundial", afirmó Lavrov, que agregó que "la Tercera Guerra Mundial sería una guerra nuclear devastadora", indicó el canal árabe en su cuenta de Twitter.
El ministro ruso dijo también que su país estaba "listo" para afrontar las sanciones impuestas por Estados Unidos y la Unión Europea por su invasión de Ucrania, pero que no esperaba que apuntaran a atletas, intelectuales, artistas y periodistas.
No obstante, pese a las medidas adoptadas en su contra, "Rusia tiene muchos amigos y no puede ser aislada", advirtió, según Al Jazeera.
Lavrov reiteró la disposición de su país para celebrar una segunda ronda de negociaciones con el gobierno ucraniano y acusó a este de dilatar estas conversaciones "por órdenes estadounidenses".
Sobre los motivos que han llevado al actual conflicto con Ucrania, Lavrov indicó que los países occidentales se negaron a atender las demandas de Rusia sobre la formulación de una nueva arquitectura para la seguridad europea.
La operación militar rusa, dijo, tiene como objetivo desarmar a Ucrania y evitar que adquiera un arma nuclear, según Al Jazeera.
"No podemos permitir la presencia de armas ofensivas en Ucrania que amenazan nuestra seguridad", añadió, de acuerdo con el canal catarí.
Declaraciones contradictorias
Horas después, sin embargo, la portavoz del Ministerio de Exteriores de Rusia, María Zajárova, ha asegurado que su país bajo ningún concepto tiene la intención de apretar "el botón rojo nuclear".
"Partimos del punto de que ese guion apocalíptico no se llevará a cabo bajo ningún pretexto y bajo ninguna condición", ha dicho en una entrevista al canal colombiano W Radio, al recalcar que Moscú ha dejado claro su posición al respecto.
"Cuando se habla del uso de armas nucleares, hemos dejado en reiteradas ocasiones nuestra posición. Por lo visto nos confunden con EEUU, pero Rusia nunca ha hablado de usar armas nucleares", ha señalado Zajárova.
Putin ordenó el pasado 27 de febrero poner las fuerzas de contención rusas en "régimen especial de servicio" tras "declaraciones agresivas" de los principales países de la OTAN, tras el inicio de la "operación especial militar" rusa en Ucrania condenada por la comunidad internacional.
El mandatario ruso dio estas instrucciones en una reunión con el ministro de Defensa ruso, Serguéi Shoigú, y el jefe del Estado Mayor de las Fuerzas Armadas, Valeri Gerásimov. Según la doctrina de disuasión nuclear de Rusia, aprobada por Putin en 2020, que tiene un carácter defensivo, el Kremlin se reserva el derecho a un ataque con armamento nuclear en caso de agresión exterior o amenaza a la supervivencia del Estado.
El documento, que incluye los principios de disuasión nuclear y las amenazas para la seguridad de la Federación Rusa, entre las que figuraría la OTAN, plantea las condiciones en las que Rusia recurriría a las armas nucleares. Entre ellas figura el empleo por parte del enemigo de armas nucleares u otro tipo de armamento de destrucción masiva contra territorio de Rusia o de sus aliados o acciones contra instalaciones estatales o militares vitales para el país que le hagan perder el control sobre el mando nuclear.
Una agresión exterior con el uso de armamento convencional que amenace "la existencia misma del Estado" también sería motivo suficiente para una respuesta nuclear. Además, Rusia recurriría a armas atómicas en caso de recibir información fidedigna sobre el lanzamiento de un misil balístico contra territorio de Rusia o sus aliados. Al mismo tiempo, el documento subraya que Rusia ve las armas nucleares "exclusivamente como un medio de disuasión" y toma todas las medidas necesarias para reducir la amenaza nuclear y prevenir un agravamiento de las relaciones internacionales que pueda provocar conflictos, incluido nucleares.