Higuaín destapa las miserias del fútbol: "La gente no tiene ni idea de lo que es un futbolista"
El delantero argentino perfila su futuro lejos del fútbol: "No es el mundo en el que quiero estar"

Higuaín, en octubre / Michael Reaves

Sus más de 100 goles tanto en LaLiga como en la Serie A hablan por sí mismos de la influencia de Gonzalo Higuaín en el fútbol. Sin embargo, no es oro todo lo que reluce. El argentino de 34 años, que todavía marca goles en el Inter de Miami, ha denunciado en una entrevista en Univisión las miserias del fútbol.
Más información
"La gente no tiene ni idea de lo que es un jugador de fútbol. Cree que jugamos al fútbol y ya está. Tenemos padre, tenemos madre, como ustedes. Y tenemos las mismas miserias que tienen todos (...) El jugador de fútbol sirve o existe hasta que juega al fútbol, después no te llama más nadie. Eso lo tengo clarísimo hace años. Es una botella descartable. Se vacía, te pisan y te tiran", ha lamentado.
Por ello, ha asegurado que su futuro "será lejos del fútbol, claramente. Muy lejos". "Lo voy a disfrutar hasta que lo juegue, pero después ni cerca. Es una contaminación muy mala. No es dolor ni molestia, siento que no es el mundo en el que quiero estar", ha añadido.

Higuaín celebra un gol durante su etapa en el Nápoles / Maurizio Lagana

Higuaín celebra un gol durante su etapa en el Nápoles / Maurizio Lagana
"Cuando uno empieza a jugar, dice ‘uy qué bonito todo’. Cuando lo empiezas a conocer a fondo, las maldades, las envidias, los celos... Ya teniendo todo lo que tengo, lo más importante, que es mi mujer y mi hija, ¿para qué voy a volver a meterme en esa burbuja? No", ha expresado.
No obstante, ha destacado lo positivo de su carrera, admitido que superó "ampliamente las expectativas que tenía" y dicho: "Soy un agradecido de todo lo que me dio el fútbol aunque tengas que pagar un alto precio por eso. Y no hablo de lo económico, sino de vida. La exposición, la maldad, el vivir juzgado todo el tiempo. Qué haces y qué dejas de hacer... Cuando eres niño, no te imaginás eso".




