"Tres saetas de madrugada"
Así contó la Radio Sevilla la Cuaresma y la Semana Santa de 1997. Hoy seguimos con el capítulo 15
Cofradías de Plata, cap 15: "Tres saetas de madrugada”
Sevilla
Todos y cada uno de los sonidos que se recogen en Cofradías de Plata, cuentan la historia de quienes somos, de lo que la Semana Santa de Sevilla refleja en nuestros cofrades, en toda la ciudad en general que cada año renueva su creencia y tradición en siete días. Por eso, la historia de nuestra semana santa alcanza su verdadero sentido cuando podemos contarla, cuando tenemos a quién contarla, cuando hay quien nos deja contarla, con mayor o menor acierto, pero siempre dejando que el protagonismo de los sonidos dicte a cada uno cómo debe situarse ante esta manifestación de fe.
En ocasiones ponemos de relieve un acontecimiento nacido de la actualidad de aquel 1997 y otras veces, dejamos que sean los sonidos de las cofradías a su paso por las calles, los que protagonicen algunos capítulos sin más comentario que la contextualización de un escenario, de sus actores, dejando que el resto lo haga, aquello que suena, y que quedó registrado en ya obsoletos aparatos y que gracias a ellos quedaron plasmados para que mucho tiempo después, recuperando sus viejos surcos, alcancen la meta de poder contar otra vez lo que vivieron, lo que grabaron. Como aquella madrugada en la que el Señor del Silencio llegaba a la Campana. “Padre mío del Silencio, yo solo puedo cantarte”, una oración cantada que entonaba Álex Ortiz cuando el primero de los pasos del Silencio llegaba a la carrera oficial. Al rato, el Gran Poder llegaba a la Plaza. Paso mandado por Pepe Ariza y un padrenuestro en la voz de Álex Ortiz, que se había mantenido allí para encontrarse con el Señor de Sevilla. Y un tercer encuentro. Llegaba el Cristo lívido del Calvario. El paso gobernado por Enrique Márquez, actual capataz del paso de la Virgen de la Presentación que cada año, plata y prisa, busca a su Hijo crucificado por nuestras calles. El genio, el arte y la devoción de Álex Ortiz acampó ese año en la Campana y la voz, por tercera vez, salió al encuentro de la Pasión de Jesús. A su continuación, otra voz esencial de nuestras saetas, Pili del Castillo, acompañaba el tránsito de la cofradía de la Magdalena
Antonio Pérez, durante muchos años capataz del misterio de la Sagrada Cena. Le escuchamos en la puerta de palos de aquel Domingo de Ramos de 1997
En el martillo del paso de la Virgen de las Tristezas de la Hermandad de la Vera-Cruz estuvo muchos años José Miguel Hidalgo, el recordado “Pemi”
Y una curiosidad, el Cristo expirante del Museo a los sones de Soria 9. Como saben, y si no le lo explico, es costumbre que la banda que acompaña al palio de la Virgen de las Aguas interprete la marcha real a la salida del crucificado de la capilla del Museo. Lo que acaban de escuchar fue la última vez que Soria 9 interpretó esa pieza al primero de los pasos el Lunes Santo. La cofradía, como explicamos en el segundo de los capítulos de este podcast, decidió prescindir de los servicios de esta banda militar.
Y de una banda que tocaba por última vez a un paso a otra que lo hacía por primera vez. La banda del Cristo de la Sangre tras el crucificado de su hermandad de San Benito el año de su debut
Tiempo para el recuerdo de otro capataz recientemente fallecido, Antonio López mandando el paso del Señor de las Cinco Llagas de la hermandad de la Trinidad
¿Conocen la historia del Señor de las Almas de los Javieres con una medalla en su cruz allá por 1997?
Nos detenemos ahora en el Viernes Santo. Las impresionantes andas que cobijan al misterio de la Carretería llegaban a La Campana. El capataz, Jaime Márquez.
Turno para Antonio Santiago cuando cada Domingo de Ramos escuchábamos su maestría al sacar el primero de los pasos de la Hermandad de la Paz donde se dispone a recoger la cruz Jesús de la Victoria