Encarna, Fuencisla y Benedicta: tres ejemplos de mujer en el medio rural

Cuéllar

Encarna, Fuencisla, Benedicta, son tres mujeres mayores, usuarias de las residencias del Grupo Sergeco, en Nava de la Asunción, Coca y Sanchonuño que en una visita a los estudios de Radio Cuéllar han repasado cómo ha evolucionado la participación de las mujeres en la sociedad. A lo largo de su vida, además de trabajar en casa, también lo han echo fuera desempeñando varios empleos. No han tenido hijos pero se muestran satisfechas por cómo han podido desempeñar sus labores e incluso atendiendo también a sus familiares en algunos casos.

Acompañadas por la directora de la residencia Sergeco en Sanchonuño, Maite Mateo y la terapeuta ocupacional Sandra Alonso han contado sus experiencias y cómo conmemoran el Día Internacional de la Mujer. Encarna es una vecina de Cuéllar, viuda, sin hijos y residente de la residencia de Coca. Ha trabajado de joven en la labranza y en la fabrica de achicoria hasta que se casó y pasó a dedicarse a las labores de la casa y al cuidado de sus padres y suegros.

Fuencisla nació en Sanchonuño y vivió en Gomezserracín, el pueblo de su marido, donde se dedicó a la labranza durante varios años. También juntos emprendieron en Madrid con la apertura de una frutería que regentaron durante 25 años. Después volvieron a Gomezserracín para, en el caso de ella, seguir trabajando como auxiliar de cocina en un restaurante de la localidad hasta que se jubiló. Enviudó a los 73 años y actualmente residente de la Residencia de Sanchonuño.

Benedicta ha vivido en Navas de Oro hasta que empezó a trabar de maestra aprobando la oposición. Desempeño su labor en la enseñanza en la localidad de Coca y en Zamora, se casó muy tarde y no tuvo hijos. Ahora reside en el Centro Sergeco de Nava de la Asunción y considera que "ha evolucionado mucho la vida con respecto a la mujer afortunadamente, y más que queremos que evolucione, porque ahora veo que la mujer desempeña puestos en los que antes no estaba presente", afirma con seguridad.

Ellas son tres ejemplos de cómo ha evolucionado la labor de la mujer en la sociedad, ejemplos del cuidado familiar en el caso de Encarna, pero también fuera del hogar, en el sector del campo y en la evolución de la enseñanza que influye en la igualdad entre hombres y mujeres.