Depurar sin dejar huella

Santa Cruz de Tenerife

Canarias, con un importante número de municipios por debajo de los 5.000 habitantes, debería optar por un sistema de depuración de aguas natural que deje a un lado a las grandes depuradoras, que consumen mucha energía, son invasivas con el territorio y llevan los residuos al mar. Así lo ha expuesto en la antena de la SER el ex-director del Parque Rural de Teno, Abel Herrera. "Tienen que bombear alrededor del 90% de las aguas negras hacia esas grandes depuradores", explica. "Esas grandes depuradoras tienen enorme consumo energético y nosotros consideramos que eso es matar moscas a cañonazos", añade Herrera.

Una propuesta innovadora para las Islas, la depuración natural, pero que desde los años 70 se lleva a cabo en Francia y que en el archipiélago tiene algún ejemplo significativo. En el municipio tinerfeño de Buenvista y sigue funcionando en Masca. Depura todas las aguas de la zona, no deja residuos y es de bajo consumo energético. Lo recomienda la UE en contra de sistemas disparatados de grandes depuradoras que se potencian en Canarias. Una estrategia que demuestra que las Islas siguen el camino equivocado.

Herrera puso en marcha de manera pionera en la Isla las primeras experiencias sobre la depuración natural. Se puso en marcha en Buenavista del Norte, hace décadas, y sigue funcionando, en Masca. Depura todas las aguas de la zona. Instalada en la bajada al barranco, sostiene que nadie se percata de su presencia, este tipo de depuradora no deja residuos, depura el agua perfectamente, no lleva los residuos al mar