La guerra de Ucrania encarece el cortado y la 'pulguita' de los canarios

Santa Cruz de Tenerife

"El batir de las alas de una mariposa puede provocar un huracán al otro lado de la Tierra"... El conocido proverbio chino es la perfecta imagen de cómo funcionan las cosas en nuestro mundo globalizado. El planeta entero ha sabido desde el primer momento que las consecuencias de la guerra en Ucrania no se limitarían a sus fronteras. Los dolores del bolsillo al llenar el depósito del coche fue lo primero que se dejó notar. Las pegas en la caja del súper si en el carro van más botellas de aceite de girasol de lo debido fue la siguiente señal de que algo marchaba muy mal más acá del cielo de Kiev. Y ahora, comerse una pulguita de queso y tomarse un cortadito en Canarias va a escalar unos cuantos puestos en la lista de gastos de los isleños. ¿También debido a los bombardeos rusos en Ucrania? Pues sí, también es por eso. Y más si el cortado es de leche y leche.

Los problemas de desabastecimiento en Canarias derivados de la guerra de Ucrania empiezan a incluir también productos que se producen aquí mismo, en el Archipiélago. El Gobierno de Canarias teme que muchos ganaderos de las Islas se vean obligados a cerrar sus explotaciones por la subida del precio de los alimentos para sus animales. La consejera del área, Alicia Vanoostende, se ha reunido este miércoles con los empresarios del sector y los cabildos para tratar de buscar soluciones. Una nueva convocatoria de ayudas y la mejora de las subvenciones a la importación son algunas de las medidas en las que se trabaja.

La consejera también ha planteado hacer valer la Ley de Cadena Alimentaria, que impide las ventas a pérdida. Vanoostende da por sentado que van a tener que subir los precios de la leche y el queso porque en estos momentos no cubren los costes de producción.

Eso, sumado a que los panaderos alertan de que tendrán que subir el precio del pan para poder asumir no sólo el alza del importe del aceite, sino el de la factura de la luz y poder enfrentar también un posible corte de suministro de la harina, significa que el típico desayuno que los canarios suelen pedir en bares y cafeterías experimentará una previsible subida de precio en los próximos días.