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Sociedad | Actualidad
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Podemos acusa a De la Rosa de ''falta de agallas'' para atreverse con el ''lobby del ladrillo''

La portavoz morada Margarita Arroyo denuncia incumplimientos en los planes de urbanización por parte de los promotores consentidos por el alcalde y su equipo de gobierno

Parque de los Ochos en el barrio de Fuentecillas / Radio Castilla

Burgos

El grupo municipal de Podemos en el Ayuntamiento de Burgos acusa al alcalde De la Rosa y su equipo de gobierno de 'falta de agallas' para enfrentarse al sector del ladrillo, por no obligar a las empresas a cumplir los compromisos en la urbanización de zonas residenciales.

La concejala Margarita Arroyo ejemplifica esta dejación municipal en el parque de los Ochos de Fuentecillas, que lleva desde 2013 pendiente de completar las dotaciones que corresponden a la Unión Temporal de Empresas (UTE) que promueve la urbanización.

El mismo lugar que el alcalde propuso para instalar las Barracas en un alarde de improvisación y mala gestión, recuerda Arroyo.

La edil morada reclama que se ejecute el aval de más de 312.000 euros que retiene el Ayuntamiento y que inste a las empresas MBG, Copsa e Hipólito García, a cumplir lo acordado, la última vez en febrero de 2020, estipulando las mismas carencias apreciadas en 2013 y estableciéndose un calendario de ejecuciones para los años 2020, 2021, 2022 y 2023. Las dos primeras anualidades incumplidas.

La portavoz de Podemos pide que los equipamientos por los que las empresas ya han cobrado se instalen, desde la red de riego a la planta de recogida neumática de residuos, la plantación en las zonas verdes, el cableado del alumbrado, bancos y papeleras o los juegos infantiles.

Margarita Arroyo sostiene que el equipo de gobierno está siendo muy permisivo con estas empresas y advierte de que no es el único caso de falta de decisión en materia urbanística.

Cita el exceso de tolerancia en el tema de la fachada del antiguo colegio Niño Jesús, las modificaciones del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) ''a la carta'' la tramitación de la Torre Panorama, el hotel de los caballos o la gestión de los terrenos de los Consorcios, en los que han resultado beneficiados unos pocos y perjudicados tanto los vecinos como el propio ayuntamiento.