La escalada de precios de la energía y la guerra de Ucrania ponen en jaque la agricultura y la ganadería de la provincia de Alicante

Alicante

El incremento del precio de la energía tiene efectos directos sobre nuestra economía y ya afecta a sectores clave de la provincia. Los agricultores constatan un aumento de coste de la producción que repercutirá en el precio del producto de cara al consumidor final.

Sin embargo, el agricultor no recibe más. La subida del precio tiene un impacto directo, sobre todo en la ganadería, a lo que se suma la incertidumbre por el futuro de los productos como frutas y hortalizas. El coste del maíz, un producto que se traía desde Ucrania, se ha incrementado de manera exponencial. Por eso piden, los agricultores de la Comunitat Valenciana, un "balón de oxígeno" con ayudas y exenciones fiscales.

Carles Peris, secretario general de la Unió de Llauradors en la Comunitat Valenciana, mantiene que su aplicación les permitiría mantener las explotaciones agrarias y ganaderas que viven en "situación crítica". Mientras la cesta de la compra sube, los precios en origen no varían. Un ejemplo, la leche: se vende a 37 céntimos el litro, se ha anunciado un aumento de 10 céntimos para marcas blancas y los ganaderos reciben lo mismo. Otro: consecuencia directa de la guerra es el desorbitado precio que alcanza el maíz importado se ha pasado de pagar 170 euros la tonelada a 370 actualmente. Seguimos sumando a esta situación el incremento de precios en el gasoil o los fertilizantes y el coste energético. Peris vaticina unos "meses muy difíciles" para el sector y para el consumidor.

Y ante los vetos a Rusia, el temor ahora es que los países europeos se vean obligados a reabsorber aquellas frutas y verduras de terceros países de fuera de Unión Europea como Marruecos que vendían allí, lo que repercutirá al producto de la Comunitat.