Los transportistas señalan que la guerra de Ucrania ha encarecido el gasóleo un 20%
Representantes del sector piden una reunión con urgencia al presidente del Gobierno y advierten: "la única opción que nos queda es repercutir este coste"

El gasóleo se vende ya por encima de los dos euros el litro en más de ochenta gasolineras del país. / EMILIO NARANJO (EFE)

València
La Federación Valenciana de Empresarios del Transporte y La Logística (FVET) advierte del impacto que está generando la guerra de Ucrania sobre el precio del combustible.
Desde que estalló el conflicto hace dos semanas, aseguran, el precio del gasóleo tipo A ha pasado de 1,478 euros por litro a 1,777 euros, un 20% más caro. Llenar un depósito de 1.000 litros, con el que un vehículo articulado de carga general podría recorrer 2.860 kilómetros, cuesta 299 euros más que hace 13 días. Según Carlos García, secretario general de la FVET, sale más rentable tener parados los camiones que soportar estas cargas.
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Carlos García, representante de los transportistas, explica que no sale a cuenta arrancar los camiones
Según señala a través de un comunicado el presidente de la FVET, Carlos Prades, "el precio del combustible ya estaba por las nubes y lo previsible es que, con la guerra en Ucrania, alcance los 2 euros por litro. La única opción que nos queda es repercutir este coste, una medida que ya está contemplada en el decreto aprobado recientemente por el Consejo de Ministros". Prades añade que el Comité Nacional de Transporte de Mercancías por Carretera, al que pertenece la Federación, ha solicitado una reunión con urgencia con el presidente del Gobierno.
Sin embargo, este no es el único problema según matiza Prades: "La escasez de microchips ha supuesto retrasos en la adquisición de los vehículos y un encarecimiento de sus precios, a lo que se suma la inflación y la revisión salarial y los problemas que ya arrastra el sector tradicionalmente y afectan a su viabilidad, como los impagos. Los márgenes son muy exiguos para los transportistas, la única opción que nos queda es repercutir la variación en el precio del combustible”.




