Borja Jiménez: "Volveremos al estado donde ganaremos casi todos los días. Lo vamos a conseguir"

La frase más repetida por Borja Jiménez en su rueda de prensa de este miércoles fue la de "lo vamos a conseguir". En un momento de dudas, donde el Rácing de Santander gana cada semana y se distancia del Deportivo, el técnico blanquiazul ha reivindicado ante los micrófonos de la sala de prensa de Abegondo las opciones de que su equipo acabe el curso en el primer puesto. Tiene, asegura, total convencimiento de que el final será feliz y de que en mayo se podrá celebrar el regreso al fútbol profesional.

"Claro que lo veo factible y tres puntos no es diferencia. Creo que van a pasar muchas cosas", confiesa el técnico del Dépor. "Hay que reconocer que ellos están en su mejor momento y aceptar que se ha juntado con nuestro peor momento del año. Creo que se equilibrará y volverán a un estado natural donde no ganan todos los días y nosotros volveremos al estado natural donde ganamos todos los días", afirma Borja Jiménez. Entiende, no obstante el pesimismo que se ha instalado en parte de la afición por el vuelco que dio la competición en poco más de un mes.

Fiel a su estilo

Borja Jiménez defendió que no puede volverse loco y hacer revoluciones de juego o practicar otro fútbol diferente al que cree. Le da naturalidad, por lo tanto, a la mala racha que vive la escuadra que dirige. "Son procesos por los que siempre pasan los equipos de balón. Es algo super natural". Añade el abulense que "no tenemos esa frescura pero creo que el equipo va haciendo más cosas de las que hacía antes. Cambiar de rumbo no tiene sentido. Ahora tenemos alguna piedra en el camino, pero lo vamos a conseguir", continúa.

No hay mano negra

Al margen de la mala racha del equipo blanquiazul o de los problemas de cara a gol, Borja Jiménez también dedicó tiempo en su comparecencia semanal a hablar de los árbitros. En referencia la jugada polémica del penalti de Jefferson Quintana no pitado por el árbitro el pasado sábado, el entrenador del Dépor defendió la buena fe de los colegiados y cree que no hay ninguna trama para perjudicar a su equipo. "No podemos ir así porque nos volveríamos locos. No puedo creer en la mala fe de los árbitros, independientemente de que me enfade. No creo en la mano negra, si creyese que nos va a pitar mal el árbitro no iría", finaliza.