Madrid escolariza a los primeros refugiados menores de Ucrania

Madrid

Las primeras medidas para acoger a las familias ucranianas en Madrid comienzan a ponerse en práctica. La Comunidad ha puesto a disposición de los niños que han huido de la guerra junto a sus madres 77.000 plazas en todas las etapas educativas, desde infantil hasta bachillerato. Son unas plazas que comienzan a ser ocupadas por 68 menores que han llegado a Madrid en las últimas semanas y que ahora se distribuyen en 27 centros educativos de 13 municipios distintos de la región.

Junto a estas plazas la Comunidad ha puesto a disposición de las familias el acceso a los programas de ayuda en los comedores, libros de texto y material escolar. Son medidas con las que se pretende fomentar la integración de los niños en la nueva vida que comienzan y a las que se añaden los recursos destinados a que los menores ucranianos aprendan el español. Entre ellos, la Comunidad ofrece aulas de enlace, unas clases con el objetivo de que estos niños aprendan el idioma. Además, el SETI (Servicio de Traductores e Intérpretes) estará disponible para prestar ayuda en la comunicación entre los centros y las familias.

Estos niños, además, no estarán solos porque se unirán a los 3.100 menores ucranianos residentes en la Comunidad de Madrid desde hace años. Con ellos podrán acudir los sábados a unas clases impartidas en cuatro centros de la región, tres en la capital y uno en Alcalá de Henares, destinadas a fomentar el contacto de los niños con su país de origen. En ellas aprenderán la cultura de Ucrania, la historia, la geografía y la literatura, unas asignaturas que ya imparten los chicos que residen en la región y a la que ahora se comenzarán a incorporar los refugiados ucranianos.

Se trata de una iniciativa en la que colaboran el Gobierno autonómico y Diáspora Ucraniana y que persigue un doble objetivo: que los niños salgan lo menos perjudicados posible de este conflicto y que puedan recibir la titulación oficial tanto de España como de su país de origen.