Un paso más

Valencia

En los últimos días, hemos visto como a nuestro alrededor se multiplican las iniciativas solidarias para ayudar al pueblo ucraniano, tanto en la frontera con Polonia como a su llegada a nuestro país. La forma en la que la sociedad valenciana se ha volcado para asistir a los perjudicados por esta guerra tan injusta, como todas, nos reconcilia con la condición humana. Y eso, después de todo lo que hemos vivido en los últimos años, está muy bien. Pero no nos podemos quedar ahí. En primer lugar, porque pasada la primera emergencia, las personas refugiadas seguirán necesitando ayuda. Y en segundo lugar, porque hay muchos otros conflictos, muchos otros refugiados que también merecen ayuda y atención.