"Bienvenidos a la ciudad"

Córdoba

'Laskavo prosymo do mista', esa es la transcripción fonética de cómo se diría en ucraniano 'bienvenidos a la ciudad'. Cuando escuchan la frase sonríen y asienten. Vienen cansados del viaje, preocupados por los familiares que han dejado allí, pero pero contentos por estar a salvo.

En los últimos tres días han hecho más de 3,400 kilómetros desde la frontera de Rumanía con Ucrania hasta Cabra. Son nueve personas en total, la mayor parte mujeres y niñas, pero también vienen dos chicos con sus madres.

"Mi nombre es Inha, mi hijo se llama Maxine, somos de Kiev y estamos en Cabra ahora", explica en inglés a su llegada a Cabra, una de las mujeres del convoy humanitario de Liudmyla Klymenco.

Inha relata como su famila vivía en Irpín una de las zonas de Kiev donde el asedio ha sido más fuerte, y de donde más personas han tenido que salir huyendo hacia las fronteras. "Estamos encantados con poder estar aquí y con la ayuda que nos ha prestado Liudmyla. Ojalá en unas semanas o en un tiempo podamos volver".

Todos se han alojado esta noche en el Hotel Mitra de Cabra y este domingo se irán incorporando con las familias y la instituciones de acogida.

LAS FAMILIAS DE ACOGIDA

Fran, Inmaculada y Carlota van a convertirse en la familia de acogida en Cabra de Sofía Ivana, una de las niñas que ha llegado en este primer turno.

"Nosotros ya habíamos acogido antes", cuenta Fran en nombre de su familia. "Estábamos viendo la tele, nos miramos y de pronto estábamos pensando los tres lo mismo", explica mirando a su mujer y a su hija.

"Había que dar un paso, había que ayudar. Estamos los tres solos y cariño desde luego tenemos y también tenemos un montón de amigos que nos están ayudando, para todo", incluso para la escolarización, dice Fran. "En situaciones como esta te das cuenta de la capacidad que tenemos de ayudarnos".

Reconoce que están "muy ilusionados pero también muy asustados, porque ahora tendrán que tener un proceso de adaptación, pero están deseando de que Sofía "pueda encontrar aquí la normalidad que le han robado con la guerra".

Carlota, la hija de este matrimonio lanzó la idea y sus padres y sus abuelos dijeron que sí. "Ya le hemos preparado una habitación en mi casa y va a venir al colegio conmigo. Tengo ganas de presentarle a mis amigas, de que venga con nosotras a dar una vuelta y también le quiero enseñar la Vía verde", explica Carlota deseosa de que Sofía se incorpore a la familia.

LA FUNDACIÓN PROMI OFRECE SUS INSTALACIONES

El ofrecimiento no se restringe solo a particulares, hay fundaciones como PROMI que han salido al frente de este llamamiento hecho por Liudmyla y por la Asociación Cien por cinco, para darle acogida a las personas refugiadas que lleguen desde Ucrania en las próximas semanas.

Juan Perez Benítez el presidente de la Fundación Promi ha ofrecido las instalaciones del entorno de la planta baja del geriátrico para los que ya han llegado y si es necesario reactivarán las instalaciones de la antigua residencia para acoger a las personas que vengan.

"En este primer turno viene un chico con discapacidad y en el segundo está previsto que llegue otro con parálisis cerebral y entendemos que PROMI es el lugar en el que mejor podemos atenderlos", explica.

Ya han puesto las instalaciones a disposición del Ayuntamiento y de la Junta de Andalucía para ayudar en lo que puedan. "Nos llamó Manolo y desde el minuto uno nos activamos. Entendemos que este es el momento de tener solidaridad", dice Juan Pérez Benitez el presidente de la Fundación Promi, que hace un llamamiento: "Es el momento de tener solidaridad, hace falta de todo, hace falta ropa, comida, una vida...y llamo a todos los que puedan a colaborar con estas familias que de la noche a la mañana se han visto en una situación tan dura".

CIEN POR CINCO, CUANDO LA SOLIDARIDAD SE MULTIPLICA ...

Esta visto que la solidaridad se multiplica. Fue tan solo conocer que Liudmyla se marchaba para traer a Cabra a Familias de Ucrania y a partir de ahí no pararon las llamadas, dice José Antonio Romero, el responsable de la Asociación solidaria Cien por Cinco.

"Teniendo a Liudmyla al frente el éxito está asegurado, estaremos para todo lo que podamos ayudar" dice Romero, que tuvo la oportunidad de viajar con ella a Ucrania hace unos años cuando traían a huérfanos de las zonas más empobrecidas de Ucrania para pasar las vacaciones con familias de aquí.