Más de un año entre listas de espera: "Convivo con dolores muy fuertes, con el sueño roto y casi sin poder salir de mi casa"

Desde el mes de octubre, Fernando, un hombre de 65 años, camina con mucha dificultad. Arrastra dolores provocados por varias lesiones en la columna. «Convivo con dolores que a veces son muy fuertes, con un sueño completamente roto porque ya no sé lo que es dormir de un tirón y una movilidad que me impide prácticamente salir de mi domicilio». Desde el primer momento, trata de solucionar su problema en la sanidad pública, pero el proceso se está postergando más de lo que pensaba. De una consulta a otra, acumulando citas para pruebas diagnósticas, tiene que esperar meses. Ya son cinco meses con dolor y acudirá por primera vez al hospital el próximo ocho de noviembre, 13 meses después de su primera consulta. Cuenta que todo esto le resulta todavía «más duro» porque ha dedicado toda su carrera profesional a la sanidad pública y que durante años trabajó en la consejería de sanidad madrileña : «me da pena ver que las cosas no las hemos hecho todo lo bien que debíamos». El primer día de octubre de 2021, Fernando se levantó con un fuerte dolor en la pierna que le impedía caminar. Esperó a ver cómo evolucionaba y después de una semana solicitó cita en su centro de salud con el médico de familia, aunque decidió acudir sin cita al ver que la demora era de dos semanas. El 13 de octubre comenzó un proceso que todavía se desconoce cuándo terminará. El médico de atención primaria decidió recetar a Fernando un tratamiento y le citó para evaluarle una semana después, el día 20 de octubre-. Al ver que la evolución no fue buena, le derivó al traumatólogo. La cita para el especialista se demoró 56 días, casi dos meses con «una movilidad muy reducida, sin apenas poder caminar 200 metros, con la sensación de tener un perro mordiéndome la pierna», relata. El 15 de diciembre, el traumatólogo recibió por primera vez a Fernando, y como es habitual, antes de realizar un diagnóstico, pidió una resonancia magnética (RMN) y una ecografía, y le volvió a citar para el 22 de febrero. El SERMAS tardó 19 días en hacerle la ecografía y 62 en realizarle la resonancia. Ya casi a finales de febrero, más de dos meses después de su primera visita, Fernando vuelve al especialista -con un doctor distinto-. Con las pruebas diagnósticas ya en la mano, el facultativo le explica que padece de varias lesiones relacionadas con la columna y que lo mejor es ser derivado a la Unidad de Cirugía de Columna del Hospital Ramón y Cajal para valorar una intervención. Otra cita más. A través de un SMS, Fernando es citado para el 8 de noviembre de 2022, ocho meses más tarde. «Aquí es donde vino mi desesperación porque la tardanza en las citas es impresionante». El 8 de noviembre de 2022, cuando Fernando acuda al Hospital Ramón y Cajal, se habrán cumplido 391 días desde que acudió por primera vez al centro de salud. Será entonces cuando el médico decida si hacen falta más pruebas, si es necesario una intervención quirúrgica y en ese caso, será en ese momento cuando Fernando entre a la lista de espera quirúrgica, una lista con 91.000 madrileños apuntados. La lista de espera quirúrgica es la más larga. En enero de 2022 hay una demora media de 73 días y casi 91.000 pacientes en la lista, aunque de ellos, 6.305 llevan esperando más de seis meses para operarse. La lista con más personas apuntadas es la de consultas externas. Desde enero de 2017 y hasta el mismo mes de 2022, los pacientes en lista de espera para una primera visita de consultas externas han crecido un 113%. Hace cinco años, había 245.806 pacientes esperando su primera visita al especialista. En enero de 2022, la cifra asciende a 523.763 personas. Hoy se esperan casi 53 días de media para esta primera consulta, cuando hace cinco años, la demora era de 12 días menos. A día de hoy, más de 257.000 madrileños llevan más de tres meses esperando a su primera visita al especialista. Pasa lo mismo con las otras listas de espera. El dato es también llamativo en lo que respecta a la espera para obtener una prueba diagnóstica. Desde 2017, el número de pacientes que esperan una prueba diagnóstica ha crecido un 885%. Entonces esperaban 86.709 personas, ahora son 163.472. De todos ellos, cerca de 70.000 llevan esperando más de tres meses para realizarse la prueba que necesitan.

Más de un año entre listas de espera: "Convivo con dolores muy fuertes, con el sueño roto y casi sin poder salir de mi casa"

Fernando esperará nueve meses para ser atendido en la Unidad de Columna del Hospital Ramón y Cajal. Esperó casi dos meses para poder ver por primera vez al traumatólogo

Joan Gimeno Guardiola

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