La pérdida de aprendizaje en Euskadi tras la pandemia fue mayor en los colegios públicos que en los concertados

Bilbao

Mientras que los centros concertados apenas hubo pérdida de aprendizaje tras un año de pandemia, en los centros públicos los alumnos perdieron entre un 10 y un 20 por ciento del aprendizaje que se da en un año académico. Así se desprende del primer estudio sobre pérdida de aprendizaje causada por la COVID-19, un año después del comienzo de la pandemia. El análisis, liderado por la Fundación COTEC y Esade Ec Pol, parte de datos de estudiantes de 4.º de Primaria y 2.º de ESO recogidos por el Instituto Vasco de Evaluación Investigación Educativa (ISEI-IVEI) que relacionan, además, la pérdida de aprendizaje con el bienestar socioemocional del alumnado por primera vez en una investigación científica.

En marzo de 2021, un año después del cierre escolar, la pérdida de aprendizaje en los y las alumnas de segundo curso de secundaria representaba un 13% del aprendizaje de un año académico, mayor en las competencias de Matemáticas y Euskera, e inexistente en la competencia de Castellano. Mientras la pérdida en Matemáticas asciende a un 25% de un año de aprendizaje en la escuela, en Euskera alcanza un 15%. El tamaño de la pérdida de aprendizaje es, sin embargo, menor respecto al de otros países, lo que puede deberse a que la mera reapertura de los centros en el curso 2020/21 fue positiva para recuperar la pérdida de aprendizaje, y lo fue especialmente entre alumnos vulnerables, según apunta el estudio.

Además, las escuelas de titularidad pública concentran la mayor parte de la pérdida de aprendizaje del alumnado, independientemente del nivel socioeconómico del centro. Además, dentro de las escuelas concertadas, aquellas con un nivel de aprendizaje previo más bajo también presentan pérdidas de aprendizaje significativas.

Entre alumnado del mismo centro, el análisis identifica una reducción de la desigualdad en los resultados dentro de la escuela, puesto que el alumnado con mejores resultados en 4.º de Primaria exhibe una pérdida de aprendizaje mayor que aquellos que tuvieron peores resultados. “Esto puede ser resultado de las medidas de compresión curricular que adoptaron los centros educativos durante el confinamiento y la reapertura”, reza el informe.

En términos de bienestar del alumnado y actitudes hacia la escuela, el alumnado socialmente más desfavorecido, aquel con un menor nivel de aprendizaje previo y los chicos sufrieron un deterioro mayor de su bienestar socioemocional durante la pandemia.