Una huelga para condicionar el acuerdo político en Educación

Los sindicatos STEILAS, ELA, LAB y Comisiones han convocado huelga en la enseñanza en Euskadi el próximo 25 para rechazar el pacto educativo e influir en ese documento.

Una "huelga preventiva", la ha calificado el consejero Bildarratz, ya que protestan contra un borrador, que pasado mañana será historia, porque los partidos están ultimando uno nuevo. Ni siquiera se trata de una ley. Es un pacto político, entre partidos del Parlamento, así lo concibió el Gobierno como objetivo, antes de encarar una futura ley.

Quieren influir, han dicho, que se tenga en cuenta su opinión. Ya se les ha escuchado en la Cámara. A ellos y a casi un centenar de agentes y expertos. Por cierto, ¿qué opinión? Entre LAB y Comisiones se me antoja un mundo. Como lo hay entre las ikastolas concertadas y la red pública.

Los partidos llevan cinco semanas negociando. Y justo ahora, cuando apuntan a un acuerdo, que podría excluir sólo al PP, los sindicatos deciden movilizarse. Otra vez la Educación como campo de batalla, precisamente lo que se intenta evitar con el pacto. Imagínense el extremo más absurdo. Un acuerdo del 90 por ciento de la sociedad rechazado por el 90 por ciento de los sindicatos. Puede llegar a pasar.