El eterno problema de Aranda: faltan trabajadores cualificados

Aranda de Duero

Es muy probable que la primera reflexión respecto al asunto que nos ocupa sea 'bendito problema', pero este problema está empezando a ser serio. Nos planteamos si en nuestro territorio las empresas siguen teniendo dificultades para acceder al mercado laboral y dar respuesta a la compleja situación de empleo y empleabilidad que muchas firmas locales atraviesan: no encuentran personal cualificado al que contratar. Por ello, en la SER hemos citado a Jorge Bermejo, CEO de Norteña, y a Enrique García, director general de San Gabriel, uno de los motores formativos de la comarca.

"Yo lo que tengo claro es que es muy complejo captar a personas con actitud para trabajar y además en la Ribera y Aranda tenemos empresas punteras a nivel nacional pero también problemas muy serios para encontrar gente aquí, por lo que traemos a gente de fuera porque además valoran lo que hacemos aquí", dice Bermejo, que cree que el primer problema real de la sociedad es la falta de actitud. "Abres un proceso de selección, recibes currículums y citas a siete personas para entrevistarles y se presentan tres. Y ya no es eso, es que la mayoría no avisan. No me cabe en la cabeza que pongas encima de la mesa una oportunidad laboral, te llamen para expresarte y defenderte y venderte para que te contraten, y no te presentes y no digas nada. Eso es falta de seriedad. Lo que los empresarios buscamos no es talento como tal, lo primero es actitud. Nosotros hacemos una actividad específica. Formamos. Y el problema que vemos es una falta de actitud total; no se puede pensar que ir a trabajar es ir a pasar ocho horas de la mejor manera posible y que te paguen por ello, necesitamos actitud, más que títulos. Porque si vas a aprender igual encuentras tu talento en lo que te facilitamos", añade el CEO de Norteña, que aporta un dato demoledor: su empresa podía haber facturado un 30% más si tuviera más capacidad productiva. Y los salarios que ofrecen están muy por encima del salario mínimo, advierte.

"Vivimos un serio problema de envejecimiento pero desde hace tiempo los niveles de natalidad son un serio problema. Y lo que sufren y visionan los empresarios es eso, que nuestros jóvenes se marchan y que la población envejece. Esto trasciende al mundo de la empresa, y urgen medidas, hay que dar la señal de alarma. Hasta hace unos años eran trabajadores de baja cualificación lo que no había, pero ahora mismo muchas empresas tienen congelados sus planes de crecimiento porque saben que ampliar es sinónimo de no encontrar el talento, y nos damos de bruces con la política que es cortoplacista, y la gente necesita objetivos de largo plazo", define Enrique. "El otro día una constructora nos llamaba pidiendo 7 personas, y nos decía que no podía empezar una obra porque no encontraba gente. Pero es que ese problema lo tienen las grandes empresas de nuestra localidad, que no encuentran los ingenieros que necesitan. A corto plazo no queda más remedio que ser lo suficientemente atractivos para que la gente del entorno se quiera venir a Aranda a trabajar, y si no, hay que abrir la inmigración organizada. Que vengan médicos, enfermeros, ingenieros... Las residencias de la tercera edad no pueden crecer porque no hay personal de enfermería", asevera.

La charla al completo puede reproducirse en el siguiente audio.