Ni la lluvia ni el viento pueden con la devoción a la Virgen
Primer día de Ofrenda a la Virgen de los Desamparados, casi 95.000 falleros y falleras pasarán por la plaza entre jueves y viernes
València
La Ofrenda a la Virgen de los Desamparados ha arrancado este jueves pese a la lluvia y al viento, que amenazaban desde primera hora a uno de los actos más emotivos de las fiestas josefinas.
La Junta Central Fallera (JCF) debatía desde primera hora si seguir o no adelante con el acto, pero finalmente ha optado por el sí, pues las previsiones meteorológicas apuntaban que las precipitaciones amainarían por la tarde.
La lluvia ha hecho que falleras y falleros hayan sumado un nuevo accesorio a sus trajes: paragüas o chubasqueros. Alba, de Poeta Altet - Benicarló, con la voz entrecortada, destacaba que había "unas ganas tremendas" de volver a pasar por la Virgen "como antes". Este año, a diferencia de lo que ocurrió en la Ofrenda de las Fallas de septiembre, se puede desfilar sin mascarilla.
A su lado, Rosa, de la misma comisión, destacaba que ni el frío ni la lluvia las iba a detener: "con un constipado que pa qué. Hemos entrado sin chubasquero, solo con el traje".
Ni el agua ni el viento pueden con la emoción durante la Ofrenda
Pepe García Bosch, coordinador de los vestidores de la Virgen, se mostraba preocupado por el viento, pero confiaba en la experiencia de los vestidores y subrayaba: las ganas pesan más.
Pepe García Bosch, vestidor de la Virgen, dice que las ganas pesan más que la lluvia
El desfile ha arrancado con lluvia débil, menos público del habitual y un ritmo rápido. El diseño de este año prevé que las comisiones falleras accedan a la plaza de la Virgen para depositar sus ramos ante la Geperudeta por las calles de la Paz, Lluís Vives, Avellanas y Palau (vía 1) y por las calles Guillem de Castro, Quart y Caballeros (vía 2). Está previsto que más de 93.000 personas desfilen entre este jueves y viernes ante la patrona de los valencianos y valencianas.