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Leclerc le roba la 'pole' a Sainz, que es tercero; Alonso saldrá octavo

Ferrari domina la primera clasificación de la temporada con Max Verstappen colándose segundo en Baréin

Charles Leclerc, el poleman de la clasificación del GP de Baréin / Lars Baron

Cayó la noche en Baréin. Se acabaron los escondites. Era la hora de los depredadores. Y quien más hambre tenía era Ferrari. Nadie se dejó nada entre bambalinas, pero fue el motor rojo quien más tenía guardado y quien tenía un poderoso plan. Parecía ser Carlos Sainz el destinado, pero en el último envite, Charles Leclerc sacó una décima de la nada para arrebatarle la pole. Max Verstappen se coló seis milésimas por encima del madrileño, a poco más de una décima del monegasco, que abre la veda del nuevo año llevando a Ferrari de nuevo a lo más alto. Desde 2007 no inaguraban los de rojo el año siendo los más rápidos. La nueva era ha llegado. Alonso sólo pudo ser octavo con el Alpine.

La carta maestra fue el motor

Abrió el grifo Ferrari, y se desató la locura. Bottas y Magnussen imitaron sectores de Verstappen en la Q1, presagiando lo que llegaría en Q3. Cuarto y quinto firmaron el Alfa y el Haas. Cualquier monoplaza montado con el motor Ferrari volaba. De ahí que todos los motorizados con la Scuderia entraran en Q2. En la primera tanda cayeron al vacío Tsunoda, Hülkenberg, Ricciardo, Stroll y Latifi en ese orden. Nico Hulkenberg, tras dos días subido en el monoplaza, literalmente, le ganó el pulso a Lance Stroll. El canadiense vuelve a ser retratado por un ‘novel’, pero para quien paga, el asiento no se quema, por muy frío que lo deje cada vez que se sube.

La zona media más reñida que se recuerda

Se mejoraron los tiempos en Q2 tras una Q1 en la que entre el primero y el decimocuarto solo había un segundo de diferencia. La zona media se antoja como un zafarrancho de combate. Arriba, apareció Verstappen firmando una vuelta que parecía descomunal: 1:30:757. Seis décimas a Leclerc. No le hizo falta ni salir a hacer un último intento, aunque bien que recibió respuesta. Carlos Sainz le replicó parando el crono a 30 milésimas. El piloto madrileño quería la pole. En la vorágine de tiempos en verde, Gasly sacó a Ocon de la Q3 sobre la bocina. Fernando Alonso entró el octavo.

Se cayeron de la última lucha Ocon, Schumacher, Norris, Albon y Zhou. El piloto francés de Alpine a menos de una décima. Mick cometió un error con el Haas que evitó ver una estampa fascinante: los dos Haas dentro. Son ellos el cuarto equipo. Nikita Mazepin tiene que estar desde su casa tirándose de los pelos. Después de estar financiando el coche, cuando podía saborear la gloria se ha quedado en la orilla. De ser tridoblados a codearse con Mercedes en la zona media. El salto es gigantesco.

Leclerc le arrebata el sueño a Carlos

La emoción y expectación con la que se llegó a la Q3 es desconocida para los nóveles y lejana para los veteranos. La reglamentación ha traído coches que pesan como elefantes, que son tan lentos como gigantescos. y tan divertidos como hacía años que no se veía. Con el primer intento España se permitió soñar. Carlos Sainz escenificaba que es un competidor como pocos. 1:30:687, con Leclerc y Verstappen en 56 milésimas. Una igualdad abrasadora. Pero en el último intento, se erigieron Leclerc y el campeón por delante. El monegasco le rascó una décima a Carlos Sainz, Max Verstappen seis milésimas. El sabor de boca es amargo y es que la pole virtual era de Carlos. Mañana saldrá tercero.

Los Mercedes, desdibujados. Su victimismo por una vez resultó ser cierto. No han dado con la tecla en este inicio de temporada y ni de cerca se asomaron a la cabeza que dominan Red Bull y Ferrari. Hamilton quedó relegado a la quinta posición, sin expectativa ni opción alguna. Russell se apagó tras guerrearle al heptacampeón el fin de semana y se hundió hasta la novena posición.

Alonso ponía de objetivo la Q3. Y cumplió. El asturiano fue octavo tras jugarse todo a una carta en un último intento con ciertos fallos. Su tiempo en Q2 fue 31,6 por el 32, 1 de Q3. Con el crono de Q2 hubiera sido sexto. El Plan necesita más, aunque Alpine siempre ha priorizado las tandas largas. Mañana tocará ver cuán competitivos son en carrera. Su objetivo serán los otros dos e inesperados contendientes de la zona media: Bottas y Magnussen. Sexto y séptimo. Los Alfa y los Haas beben del motor que más ruge, el Ferrari.

Juan Antonio Requena

Estudiante de periodismo. Antes en Diario AS....