El Valencia Basket cierra su semana fantástica en la Fonteta con una sufrida victoria

Valencia

Arrancó Ponsarnau dando la iniciativa a la segunda unidad en torno a Hermannsson. Y al equipo le sentó de maravilla, pues arrancó noqueando en los primeros minutos al equipo zaragozano, con el entrenador Aleix Durán (lástima que la destitución en los últimos días dejara a Ponsarnau sin su esperado regreso a la Fonteta) ajustando piezas. Con Puerto, López-Arostegi y, sobre todo, Pradilla marcando el paso, el equipo taronja arrancó con un parcial 11-2 y dominando en los primeros diez minutos hasta terminar el primer cuarto 19-11.

Ya con la primer unidad en la pista, el Valencia Basket pudo mantener la misma tónica en los primeros minutos del cuarto, con un brillante Rivero en la pintura acompañado de un gris Dubljevic. Pero, pese a estar dirigidos por un acertado Prepelic, los locales no fueron capaces de mantener a raya a un Casademont Zaragoza que fue ganando terreno con el paso de los minutos y, liderado por Jordan Bone, fue recortando distancias hasta llegar al descanso sólo cuatro puntos abajo: 38-34.

Este renacer zaragozano se iba a confirmar en el tercer cuarto, en el que llegaron a ponerse por delante: 53-54. Pero fue en ese momento cuando apareció milagroso López-Arostegi con un 2+1 que disparó al Valencia Basket hacia un parcial 10-0 que dio oxígeno a un equipo que llegaba al final del cuarto bloqueado pero que resucitó para terminar 63-57 con Tobey y Prepelic liderando la reacción taronja.

Y así se dio paso al último cuarto, en el que el Casademont Zaragoza volvió a dejar claro su empeño en dar la campanada en la Fonteta. La dupla Bone.Mobley volvieron a llevar a su equipo hacia la igualdad, que se puso de manifiesto con un 66-66 que dejaba las espadas en todo lo alto entrando ya en los dos últimos minutos. Pero fue en ese momento cuando, como al principio, apareció Pradilla para hacerse gigante en su pintura y en la zaragozana, con un gancho que abrió brecha. Otro triple de Bone metió el último susto en el cuerpo a la afición local y lo intentó hasta el final aprovechando los fallos desde el tiro libre de Dubljevic. Pero la victoria, muy apretada, se quedó en casa: 81-79.