El Gobierno de coalición aprueba el primer paso del Estatuto del Artista que mejora la indemnización por despido

La pandemia puso de manifiesto la urgencia del Estatuto del Artista, una petición del sector de la cultura que venía de lejos y que entre otras muchas cosas tenía la reivindicación de mejorar las conciones laborales y de contratación de los trabajadores y trabajadoras de la Cultura. Hasta siete ministerios llevan meses negociando su redacción, entre ellos Cultura y Trabajo, que han llegado a una serie de acuerdos que hoy salen adelante en un Real Decreto-ley aprobado en el Consejo de Ministros.

En el texto, al que ha tenido acceso la SER, se adapta el régimen de la relación laboral de carácter especial de las personas dedicadas a las actividades artísticas, así como a las actividades técnicas y auxiliares necesarias para su desarrollo. La clave principal, la anunciaba Icete hace unas semanas, el que habrá un nuevo contrato, de que ya se conocen más detalles. Se va a crear un nuevo régimen de contratación con una modalidad específica: el contrato laboral artístico, de duración determinada, para atender a las necesidades específicas del sector, caracterizado por la temporalidad y la intermitencia de su actividad. Esta característica fue la que hizo que muchos de sus trabajadores no pudieran beneficiarse de las medidas adoptadas por el gobierno durante la pandemia, al principio, y es el principal objetivo de estas primeras medidas.

Se incopora además, en este texto, la relación laboral especial de las actividades técnicas y auxiliares, reconociendo los derechos de un colectivo especialmente afectado por la contratación fraudulenta como falsos autónomos. Se elimina el concepto de “artistas en espectáculos públicos” y se amplía la definición haciendo referencia a “las actividades culturales en el ámbito de las artes escénicas, audiovisuales y musicales”.

Los cambios surgidos en la cultura con la llegada del streaming y lo digital también entran en este Real Decreto-ley que adapta la legislación a la producción de expresiones artísticas en el entorno web y las nuevas fórmulas de difusión como el streaming, la difusión online o el podcast.

Dos de las principales novedades, que no se conocían hasta ahora son la mejora del régimen indemnizatorio de estos contratos, a 20 días cuando la duración del contrato exceda de 18 meses. Se insiste también en el texto en combatir la precariedad y la concatenación de contratos de temporada. Se hará impulsando que este tipo de contratos pase a ser indefinidos o de tipo fijo discontinuo, dependiendo de cada actividad profesional.