Clamor en la Junta de Portavoces del Congreso para que Sánchez explique ya el cambio de posición del Gobierno sobre el Sáhara

El cambio de posición del Gobierno respecto al Sáhara ha incrementado la tensión este martes en la reunión de la Junta de Portavoces en el Congreso. Todos los grupos parlamentarios menos el PSOE han exigido en esa reunión que Pedro Sánchez comparezca este miércoles para dar explicaciones. Lo han pedido desde PP y Vox a Ciudadanos, pasando por ERC, Bildu, PNV, Más País... todos entienden que este giro requiere un cambio del orden del día del pleno de esta semana para que sea Sánchez el que acuda mañana a dar explicaciones y no el ministro Albares. Fuentes asistentes a la reunión aseguran a la SER que tanto Aitor Esteban como Gabriel Rufián han sido muy vehementes en remarcar la necesidad de esa urgencia que no comparten ni el Ejecutivo ni el grupo socialista, que defienden que primero sea el ministro de Exteriores el que comparezca. Unidas Podemos no se ha posicionado ni en favor del PSOE ni en el del resto de partidos. Sobre la fecha en la que Sánchez comparecerá, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha sido concretado que será «probablemente» el 30 de marzo: «Como es habitual, el presidente el Gobierno va a comparecer en el Congreso para dar cuenta de las conclusiones del Consejo Europeo, de la Cumbre de la OTAN, del plan de respuesta para paliar las consecuencias económicas de la guerra y el nuevo marco de relaciones con Marruecos. Estamos ajustando fechas pero, probablemente, será el miércoles de la semana que viene». Rodríguez ha explicado tras el Consejo de Ministros que «la diplomacia requiere de tiempos y, en ocasiones, de discreción». Ha insistido en defender que la paz sellada con Marruecos a costa de los saharauis es un «buen acuerdo» que «es una buena noticia para España»: «Supone el cierre de una crisis política en la que estábamos ambos países». «Este es un acuerdo por el que nos felicitamos porque redunda en la estabilidad de nuestro país. El Gobierno no ha parado de dar explicaciones desde el primer momento», ha asegurado. También ha insistido Unidas Podemos en que no va a romper con el PSOE a pesar de que el Gobierno de coalición vive uno de sus peores momentos, con grandes desavenencias sobre cómo gestionar la guerra de Ucrania o la crisis energética y ahora el apoyo al plan de Rabat para el Sáhara, que también ha generado mucho malestar en los socios de investidura. Lo ha dejado claro el portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique, en una rueda de prensa en el Congreso después de que algunos de los apoyos de legislatura del Ejecutivo, como EH Bildu o Compromís, advirtieran a éste que decisiones unilaterales como la del Sáhara, sin contar con el bloque progresista, puede comprometer esa mayoría. Pese al enorme enfado que tiene Unidas Podemos por la decisión de Pedro Sánchez de respaldar la propuesta de autonomía de Marruecos para el Sáhara, no van a dejar el Ejecutivo porque consideran, ha explicado Echenique, que son «una pieza clave y la única garantía» para asegurar que el Gobierno siga haciendo políticas progresistas. Creen que son también clave para que las próximas elecciones se pueda revalidar esta mayoría progresista e impedir un Ejecutivo de Alberto Núñez Feijóo y Santiago Abascal. Si el Gobierno está a la altura de las expectativas, ha avisado el portavoz morado, «se podrá revalidar esta mayoría», pero si no lo consigue, el país se acercará a una etapa «de involución democrática». Por tanto, ha insistido en que no existe riesgo de una ruptura de la coalición ni por parte de Unidas Podemos ni tampoco por parte de los socialistas; «al menos por lo que nos cuentan a nosotros y a los medios», ha dicho. Desde ERC, su portavoz, Gabriel Rufián, ha pedido a Unidas Podemos que reflexione si pueden ser más útiles “dentro o fuera del Gobierno”, porque “hay una sensación en la calle de que quizás se están tragando demasiados sapos”.