València retoma su plan de abrir en Safranar una tercera cochera para la EMT

El Ayuntamiento de València ha decidido impulsar definitivamente la construcción de una tercera cochera de la EMT. En concreto se ubicará en Safranar, entre la ampliación del cementerio y las cocheras de San Isidro.

La decisión viene auspiciada por la llegada a València de fondos europeos Next Generation para la electrificación de las instalaciones de San Isidro y la inminente llegada de 20 nuevos autobuses eléctricos.

El proyecto de Safranar se remonta a 2018 y contemplaba habilitar una campa en los terrenos de casi 16.000 metros cuadrados anexos a la cochera de San Isidro para aparcar los nuevos autobuses que la entidad estaba comprando dentro de su plan de renovación de la flota. Un proyecto que se paralizó con la pandemia ya que las unidades han ido llegando de forma más escalonada. Ahora el Ayuntamiento se plantea un proyecto mucho más ambiciosa: convertir Safranar en una nueva cochera preparada para albergar vehículos eléctricos.

Y es que, con el objetivo de acelerar la descarbonización del transporte urbano para avanzar hacia el objetivo de que València sea una ciudad neutra en 2030, la EMT considera necesario rediseñar el proyecto inicial para que sea más ambicioso y acompañe el proyecto global de ciudad. De esta forma, se pretende convertir Safranar en una nueva cochera preparada para dar respuesta a las necesidades de los autobuses cero emisiones y afrontar los nuevos retos de la movilidad urbana.

Según ha sabido la SER, la EMT tiene previsto que el próximo consejo de administración resuelva el actual contrato previsto para la campa y realizar una ampliación del proyecto que incorpore la adecuación de la infraestructura y su obra civil. Entre otros aspectos, este nuevo depósito deberá contar con las zanjas pertinentes a lo largo de las calles de las dársenas y sus adaptaciones de cableado en el subsuelo.