La resurrección del Tajo

Toledo

Después de escribir sobre la guerra que acontece en Ucrania, he querido acercar mis pensamientos a nuestra ciudad, Toledo.

Esta vez, quiero expresar una clara reivindicación por parte de la juventud toledana ante las diferentes administraciones públicas implicadas, las cuales deben actuar cuanto antes, porque una parte de nuestra ciudad se muere, van pasando los años y elecciones, sin que este problema se solucione.

Toledo está resucitando después de la difícil situación que han vivido y actualmente siguen viviendo muchos comerciantes y hosteleros. Es verdad, que poco a poco vamos recuperando las cifras de turismo anteriores a la pandemia, pero no es menos cierto que la mayoría de las personas que pernoctan o que pasean por nuestras calles es turismo nacional, cuando antes había una gran cantidad de viajeros que llegaban a nuestra ciudad desde distintos puntos de la geografía mundial, actualmente por desgracia son minoría.

Cada día vemos a miles de personas admirar los distintos monumentos de nuestra ciudad, pasear por nuestras calles, visitar los múltiples museos, disfrutar de nuestra gastronomía y de las diferentes actividades. Por desgracia, la mayoría no pueden disfrutar totalmente de nuestro río.

El Tajo debería ser una parte fundamental de nuestra ciudad, forma parte como no puede ser de otra forma de los orígenes de Toledo, he comentado lo que supone el turismo para nuestra ciudad, por intentar ejemplificar el gran problema existente. Es más importante que los toledanos tengamos una conexión mayor con el río y sus aledaños, que lo pudiéramos disfrutar plenamente.

Me da envidia sana, cuando voy a otras ciudades como Zaragoza, Sevilla e incluso ciudades europeas como Budapest, donde la conexión urbana con sus respectivos ríos es crucial e incluso ejerce como eje vertebrador del turístico.

Lógicamente, el relieve de nuestra ciudad no es similar al de las capitales que acabo de mencionar, algo que le imprime un carácter especial y único. Pero esto no puede significar que los ciudadanos no sintamos esa conexión con el Tajo.

Cada semana, vemos noticias en los medios de comunicación sobre planes de futuro para nuestro río, proyectos que por desgracia nunca ven la luz, tenemos una senda ecológica que es un elemento que se encamina a esa cercanía, a esa cohesión que

quiero expresar, pero también es cierto que hay tramos que se anegan en las épocas del año donde el caudal es elevado, pero fue un comienzo importante.

Por ello, no podemos permitir que el poder político se relaje, debemos de reclamar que se lleven a cabo proyectos realistas y que estos vean la luz cuanto antes. Los toledanos no queremos fuegos artificiales, tenemos la voluntad de que el río Tajo sea como hace siglos un enclave importantísimo tanto para los habitantes de la ciudad, como para los diferentes visitantes.

Debemos de reflexionar que modelo queremos de ciudad, conformarnos con mostrar y disfrutar de una parte de la ciudad, de una cierta zona de nuestro conjunto histórico o apostar por el progreso en todos los sentidos, para lo cual lo primero debemos de hacer es revivir el río Tajo y acercarlo a todos y cada uno de los ciudadanos.

Es necesario resucitar nuestro río.