Yolanda Díaz admite resistencias en "un bloque" del Gobierno a las medidas de Unidas Podemos, como congelar alquileres, el impuesto a las eléctricas o temas laborales

Madrid

El paro en los transportes que ha sacudido España en los últimos días, las consecuencias de la guerra en Ucrania y los cuellos de botella que ya lastraban la economía europea tras superar lo peor de la pandemia han dado un cerrojazo a la recuperación económica y social de nuestro país, a la espera del plan de choque que prepara el Gobierno para finales de marzo.

La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, se plantea volver a prohibir el despido objetivo —como ya ocurrió cuando la economía española quedó en hibernación por el COVID— y ha reiterado la importancia de los ERTE como herramienta para que las empresas no echen a sus trabajadores.

En la entrevista concedida a Hora 25, Díaz le ha explicado a Aimar Bretos que "no es el momento de despedir ni de bajar los salarios, sino de arrimar el hombro", añadiendo que "los que más tienen son los que más se tienen que comprometer". Díaz ha citado expresamente los beneficios de las grandes eléctricas.

Díaz también ha confirmado que estaba "a punto de lanzarlo", pero por responsabilidad ha decidido "paralizar el proceso de escucha" encaminado a formar un nuevo proyecto de cara a las próximas elecciones generales: "Mi equipo sigue pensando y diseñando cosas. No soy un proyecto electoral todavía y no me preocupa que se adelanten las elecciones. Me preocupa que se debilite la democracia".

La vicepresidenta también ha reiterado sus discrepancias sobre el Sáhara: "No se ha votado en el Consejo de Ministros, así que el cambio debe explicarlo el PSOE. La resolución de Naciones Unidas no habla de autonomía, sino de libre determinación. Estoy en comunicación permanente con el ministro Alvares y aquí tenemos una discrepancia. Me duele por el Sáhara, claro. Para mí las formas son importantes y creo que no fueron correctas".

Reflexiones sobre la situación económica

• "Las medidas que hemos adoptado en la crisis de la pandemia, fundamentalmente los ERTE y la vocación de no despedir, fue el éxito de gestión de la misma, permitiendo una salida de la crisis diferente, con una tasa de paro del 12,7%. No es el momento de despedir ni de bajar los salarios, sino de arrimar el hombro. Los que más tienen son los que más se tienen que comprometer".
• "Quiero dar un mensaje de esperanza. Vamos a salir de esta crisis por difícil que sea. Y ahora toca más coalición que nunca porque la alternativa es la coalición del odio".
• "No sería comprensible que los centenares de miles de trabajadores de las eléctricas, que tienen grandes beneficios, vieran sus salarios congelados. Empresas con beneficios no pueden congelar los salarios".
• "Toda la sociedad va a salir más pobre de esta crisis por efecto de la inflación, pero la gente que gana 1.000 euros en este país no tiene nada más que dar".
• "No hay ningún mecanismo de protección social en Europa que permita despedir".
• "En el Gobierno siempre hay una parte que no comparte ciertas medidas, pero no lo entiendo porque los ERTE fue lo que consiguió que saliéramos de la crisis de forma distinta. Estamos discutiendo. Estamos de acuerdo en muchas cosas, y en otras no".
• "Lo que no puede ser es que esta crisis la resolvamos, como hizo Mariano Rajoy, con la mayor devaluación salarial de la historia. Eso es lo que ya está pidiendo el PP. No hay medida más injusta que bajarle los impuestos a todo el mundo. Los servicios públicos se pagan con los impuestos de todos y todas. Vimos que la sanidad estaba mal, que las residencias estaban fatal"...
• "Las medidas de la factura de la luz tienen un coste fiscal muy elevado".
• "Me he reunido con 60 economistas de todo tipo y condición y no son partidarios, en estas circunstancias, de recortar los impuestos. Tendríamos que recortar los servicios públicos".
• "El Gobierno trabaja con muchísimas propuestas y es difícil. Hay formaciones que proponen reabrir térmicas y volver al carbón, y otras que proponen avanzar en las renovables... ¡Es complicado! Habrá que hacer una síntesis".
• "Estamos sin parar y vamos a seguir así todo el fin de semana y redactar tantas medidas como sea necesario. Todos somos conscientes de la gravedad del momento que estamos viviendo. Hay mucha preocupación y mucha responsabilidad. El gobierno de España está preavisado para no parar durante el fin de semana. Ya estamos acostumbrados. Lo hicimos durante la pandemia".
• ¿Se acerca una avalancha de ERTE? "Esta crisis no es la de la pandemia. Va a generar un enorme escenario de incertidumbre, va a haber una ralentización económica y va a afectar al empleo. Pero vamos a proteger a los trabajadores y a las familias, como ya lo hemos hecho".

Reflexiones sobre el descontento social

• "Soy perfectamente consciente del cabreo social. El enfado de los ganaderos o los transportistas no es algo menor. Hay un problema estructural agravado por el impacto de la inflación. Conozco perfectamente el malestar, lo respeto y creo que el Gobierno ha de estar más cerca de la calle que nunca".
• "Los transportistas que están en la calle son los más débiles de la cadena. ¿Quién trabajaría a pérdidas? ¡Nadie! Pues hay que resolver este problema. Hay desesperación y tenemos que estar del lado de los sectores productivos".
• "Es un conflicto poliédrico de gran complejidad. Son problemas que no se resuelven en unas horas. Ya se han puesto encima de la mesa 500 millones de euros".
• ¿El Gobierno debe sentarse a negociar con la plataforma convocante de la huelga? "En el espacio formal hay unas normas, pero eso no quita que hablemos con pequeñas plataformas, autónomos, colectivos o sindicatos. Podemos actuar de forma versátil".
• ¿Patinó el Gobierno al relacionar la protesta con la extrema derecha? "Yo no califico a nadie. Gobernamos para todo el mundo. El Gobierno no tiene camisetas y sabe que hay razones en todos los colectivos que están en la calle".
• "La democracia se ensancha con movilizaciones si son pacíficas".
• Propuso un impuesto especial para las eléctricas. ¿Se va a hacer? "Los beneficios de las tres grandes eléctricas, 10.022 millones de euros, suponen la mayor transferencia de la historia. La Comisión Europea habla de beneficios caídos del cielo. ¿Por qué no se habla de los bonus que se reparten en los grandes consejos de administración? Yo quiero justicia fiscal. Hay multinacionales que no se acogieron al ERTE, como Inditex, y lo dije públicamente. Es de agradecer".
• "Se puede convertir en un problema que no congelemos las rentas de arrendamiento".

Reflexiones sobre el Sáhara y el futuro de Podemos

• "La decisión del Sáhara no se ha votado en el Consejo de Ministros, así que el cambio debe explicarlo el PSOE. La resolución de Naciones Unidas no habla de autonomía, sino de libre determinación. Estoy en comunicación permanente con el ministro Alvares y aquí tenemos una discrepancia. Me duele por el Sáhara, claro. Para mí las formas son importantes y creo que no fueron correctas. Pero también tenemos diferencias en materia tributaria y no pasa nada".
• ¿Qué ha pasado con Meri Pita? "Es una crisis interna de Podemos. He hablado con ella esta mañana. Lo tienen que gestionar y resolver. Las diferencias internas uno tiene que manifestarlas de manera coherente. Yo dije que si no salía la reforma laboral, me iba a mi casa".
• ¿Se va a presentar a las próximas generales? "Voy a paralizar el proceso de escucha y me da pena porque estaba ilusionada, pero por pura responsabilidad voy a pararlo. Mi equipo sigue pensando y diseñando cosas. Si no fuese por la situación, iba a lanzarlo ya. No soy un proyecto electoral todavía. no me preocupa que se adelanten las elecciones. Me preocupa que se debilite la democracia".
• "Me preocupa que haya un proyecto liderado por Núñez Feijóo que no se desligue claramente de la extrema derecha".