El micromentario de Pepe Belmonte: 'Lo de Feijóo y Bernabé'

Murcia

Lo de Feijóo y su apuesta por el futuro presidente del PP en Murcia no se debe a una indecisión, sino, únicamente, a su condición de gallego que, subido a una escalera, no se sabe si sube o si baja.

Nadie conoce con certeza si está decidido a llevar a cabo una reforma profunda de su partido en Murcia, haciendo tabla rasa, o darle continuidad a un proyecto que, desde hace años, está, como el Mar Menor, en la UVI, casi muerto, con tanto cachondeo en las consejerías, con tanto ir y venir de tránsfugas, como si se tratara de un baile de vampiros al estilo Polanski.

En todo caso, dirija quien dirija al PP, y suceda lo que suceda, lo que sí está claro es que la culpa de todos nuestros males la tendrá, cómo no, el presidente Sánchez.

En las redes sociales la gente se burla de la actitud oportunista y cobarde, de auténtico veleta, del senador popular Francisco Bernabé. Hasta hace unos días, el peor delegado del gobierno de la democracia en Murcia, apostaba su patrimonio y su propia vida por Teo y por Casado, de los que escribía auténticas maravillas en sus tuits. Cuando ambos han caído en desgracia, Bernabé se ha quedado en el aire y se agarra desesperadamente a la brocha para no caer al vacío, a la espera de decidirse por el nuevo ídolo a quien dirigir sus loas y encendidas alabanzas.

En silencio, sin molestar a nadie, del mismo modo como había vivido, murió el pintor murciano Ángel Pina Nortes, a los 89 años de edad. Reflejó como nadie el esplendor y la alegría de la huerta, con sus retratos de huertanas y huertanos ataviados con sus trajes típicos y sus arreboles reflejados en el rostro. Fue, acaso, el discípulo más aventajado y fiel de Pedro Flores.

Desaparece así, junto con Falgas, Avellaneda, Muñoz Barberán, Molina Sánchez o Párraga, uno de los artistas plásticos más preclaros e ilustres de nuestra región. Un hombre bueno que expresó con su pincel que, a pesar de todo, la vida es bella.

Pepe Belmonte