Jaén

Ha sido una auténtica odisea poder traer un paso de Semana Santa a Baeza durante la huelga de transportes. Eso es lo que ha vivido la Cofradía de la Humildad de Baeza, que este año estrena paso procesional para su Cristo, realizado en Córdoba, y paralizado en el taller por la huelga de transportes. Una situación que han vivido con tremenda incertidumbre, tal como confirmaba en declaraciones para Radio Jaén Cadena SER el hermano mayor de esta señera cofradía del Jueves Santo baezano, Antonio Moreno. “No sabíamos cómo lo íbamos a traer”, reconoce Moreno una vez pasada la angustia inicial y tras haber podido solucionar el problema ayer lunes.

“Llevábamos dos semanas que no sabíamos de qué forma lo íbamos a hacer”, asegura el hermano mayor indicando que a mediados de marzo ya tenía que haber estado en Baeza. El reloj marcaba en su contra, porque había que hacerle al paso de Semana Santa una serie de adaptaciones con elementos del paso antiguo. Algo que tendrán que ejecutar en la Cofradía con menos de dos semanas de plazo. “Tema de candelabros que había que adaptar, tema de trabajaderas, tema de medidas, tema de esponjitas, el respiradero que nos está haciendo un bordador”, por lo que tocará esforzarse a base de bien ya que van “muy apretados de tiempo”.

Angustia en la Cofradía

“El paso no se podía traer por la huelga de transportes. Pasaban los días y pasaban los días, y seguía la huelga. Y pasaban los días, y seguía la huelga. Nos intentábamos convencer diciéndonos que esto iba a durar tres días y no va a durar más. Pues no. Se iba alargando una semana y otro día, y otro día. Y ya estábamos sofocados. Varios hermanos de la cofradía estaban dispuestos a ir a por el paso, porque tienen su camión. Pero con la huelga de transportes no se querían arriesgar por los piquetes, y temiendo que les hicieran algo. Incluso planteamos la posibilidad de ir de noche, para evitar los piquetes”, contaba Antonio Moreno.

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Efectivamente había muchos hermanos que querían ayudar para traer el paso, pero el riesgo era mucho. La solución llegó con una empresa cercana a la Cofradía, “que se echó para adelante” a pesar del temor a los piquetes, incluso violentos, de la huelga de transportes. “El viaje de ida fuimos con el alma en vilo, a la vuelta ya íbamos más tranquilos”, nos decía aliviado Antonio Moreno. Este retraso en la llegada del paso a Baeza ha influido también en los ensayos de costaleros, algunos de ellos han tenido que ser suspendidos.

Retablo andante

Pero la historia ha tenido un final feliz, aunque cualquiera le quita el miedo en el cuerpo que ha sufrido la Junta de Gobierno de esta Cofradía de la Humildad de Baeza que veía que no podrían estrenar su sueño dorado y que tanto trabajo está costando a esta entidad semanasantera. Ahora solamente queda disfrutar de lo que será un auténtico “retablo andante”, digno de la talla de más de 450 años que encumbrará este paso, el magnífico Cristo de la Humildad de Baeza, atribuido a Pablo de Rojas. Hay ilusión a raudales entre los miembros de la Cofradía por un proyecto tan ambicioso como el que tienen entre manos con este nuevo paso.

“Es un revulsivo, es un aliciente, es una ilusión para nosotros, para la banda, para los costaleros, para toda la cofradía en general”, decía. También lo será para Baeza. “Llevamos soñando con esto, por lo menos, cuatro o cinco años. Con el presupuesto que había, se eligió este proyecto. No se publicó en ningún sitio. Cuando hemos tenido solvencia es cuando hemos decidido hacer la primera fase del proyecto”.

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Antonio Moreno, hermano mayor de La Humildad de Baeza reconoce que el proyecto se ejecutará a muchos años vista porque es complejo. Lo talla el reconocido tallista Jose Carlos Rubio Valverde, quién ejecutara pasos de la envergadura de la Santa Cena de Jaén o el Cautivo de Córdoba. Tendrá un peso que oscilará entre los 800 y los 900 kilogramos y será portado por 30 costaleros en las 6 trabajaderas de las que dispone. Irá al estilo jiennense y baezano, es decir, cargado a dos hombros.

“El proyecto del paso se definió en 2018”. Se eligió entre tres proyectos de diferentes tallistas “porque es el que más resaltaba la figura del Cristo”. Va en estructura piramidal, visto desde el frontal formará una pirámide perfecta desde la base (respiraderos) del paso hasta las potencias del Cristo de la Humildad. Será tallado en un estilo altamente barroco, con mucha filigrana. Y será rematado en dorado y con distintas esculturas que adornarán este maravilloso paso procesional. “En la calle será un espectáculo”, se congratulaba emocionado el hermano mayor, quién invitaba a la ciudadanía a conocer el paso procesional por las tardes en la Casa de Hermandad que se ubica junto a su parroquia del Salvador.