"Los profesores podemos detectar un problema de salud mental pero no solucionarlo, necesitamos especialistas en los centros"
Docentes de Primaria y Secundaria piden a la consejería de Educación aumentar las plantillas de orientadores ante el aumento de los casos de ansiedad y autolesiones entre el alumnado
Murcia
Los alumnos de la Región de Murcia han pasado casi dos cursos confinados, con clases on line y sin contacto con sus amigos y compañeros, una situación que, sumada a sus circunstancias personales, ha provocado un aumento de los trastornos de salud mental.
Docentes de Primaria y Secundaria piden a la consejería de Educación aumentar las plantillas de orientadores ante el aumento de los casos de ansiedad y autolesiones entre el alumnado
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Entre los alumnos de Primaria "hay casos en los que somatizan dolores, por ejemplo, porque no quieren venir al colegio y entonces lo manifiestan con me duele la cabeza o me duele la barriga. Hay otros que simplemente son con trastornos de conducta negacionistas. También hay centros donde se están dando casos de autolisis, en el que los niños se lesionan, esos son los más graves y los que más nos preocupan", ha explicado a Radio Murcia Olga Catasús la presidenta de la Asociación de Directores de Colegios Públicos en la Región de Murcia.
Los casos de autolisis también aumentan entre los adolescentes, aunque no es el único problema en este sentido. "Lo que más llama la atención son los problemas que tienen los alumnos en su resultado académico por problemas de ansiedad sobre todo, es el que más se está repitiendo. Chicos y chicas que no acuden a hacer los exámenes porque tienen unos problemas de ansiedad tremendos que están apareciendo desde la pandemia", ha detallado a esta redacción Francisco Yagües, profesor en el IES Vicente Medina de Archena.
Para abordar la aparición de estos nuevos problemas entre el alumnado, ambos docentes consideran que los recursos con los que cuentan son insuficientes. En el colegio de Catasús llevan quince días esperando al denominado Equipo de Convivencia, el único disponible en toda la Región y en el Instituto en el que da clases Yagües la única orientadora que hay para atender a mil alumnos tiene una lista de espera de dos meses. "Aquí hay problemas de autolisis, de gente que se autolesiona y eso no puede esperar dos meses. Hay verdaderas urgencias", ha lamentado Francisco Yagües.
Cuando un profesor detecta que un alumno se está autolesionando se comunica al equipo directivo del centro y al departamento de Orientación. Ellos son los encargados de actuar y de comunicarlo a la familia que, normalmente tienen que buscar los recursos fuera del centro. "Solicitan una consulta en el Servicio Murciano de Salud o bien acuden a la sanidad privada aquí en el centro no podemos darle cobertura a ese problema", ha explicado este profesor.
Todos los docentes conocen los protocolos y saben cómo ponerlos en marcha pero no están capacitados para dar una solución a sus alumnos y el personal disponible para darla tarda en llegar semanas o incluso meses. Preguntados por el Plan de Choque en Salud Mental elaborado por las consejerías de Sanidad, Educación y Política Social, opinan que está bien como guía para el profesorado pero necesita que incluya la incorporación de especialistas. Además "se deben reforzar las plantillas de los centros para que puedan percibir mejor los problemas y dificultades que se den en el alumnado y también las plantillas de los equipos de orientación", ha reclamado Catasús.
"El manual ese está bastante bien, yo que soy un tutor puedo diagnosticar el problema pero hace falta aquí una persona especialista que nos trate y que nos diga cómo solucionarlo. Es decir, para el diagnóstico creo que estamos capacitados los profesores pero para lo que no estamos capacitados es para darles solución, necesitamos especialistas aquí en los centros", ha declarado Yagües.
Recuerda también Francisco Yagües que hay una asignatura pendiente: la prevención del suicidio entre adolescentes. Sigue siendo un tema que no se aborda y para el que este profesor de secundaria admite no estar formado, ni tener protocolos. "Es un poco como una patata caliente bastante importante que, lo único que pedimos, es que no nos explote a nosotros aquí. Pero no tenemos ningún protocolo ni se trata el problema del suicidio, sigue siendo tabú".
Maica Sánchez
Me escuchas cada día en La Ventana Región de Murcia.