Sociedad | Actualidad

Vivir con la renta o vivir de la renta

José Manuel García Margallo, Pablo Simón y Cristina Monge debatieron en torno al concepto de la renta básica universal en la segunda mesa del Congreso del Bienestar de Cádiz

Cádiz

Renta básica universal: garante de justicia. Ese era el nombre elegido para la segunda de las ponencias-diálogos del Congreso del Bienestar de Cádiz, que pretende abordar la felicidad y la justicia social. La periodista de la SER Marisol Rojas ha sido la responsable de moderar esta mesa. Rojas arrancaba con una breve explicación sobre el concepto central del panel: "La renta básica universal es una asignación económica, universal y sin condiciones. No es un subsidio. Es un ingreso que recibimos independientemente de nuestras condiciones".

En el horizonte, en ese momento, muchas incógnitas para abordar entre José Manuel García Margallo, Pablo Simón y Cristina Monge. Empezaba a despejarlas García Margallo, quien ha arrancado

Lo que dicen los datos es que a pblacion va a aumentar en los proximos 10 años de manera desigual, los paises desarrollados sufriran une stancamiento demografico y el crecimietnos era en zonas menos desarrolladas del planeta, las zonas pobres. África tiene 1.250 millones de habitantes. En 2030 tendrá 1.700 millones. Además, habrá otro factor importante, que es el envejecimiento de la población, lo que conllevará un mayor gasto en pensiones y en sanidad. Aun así, el mundo va a crecer.

Su primera reflexion partió de la desigualdad; concretamente la interna, que crecerá por encima de la situación actual, en la que el 1% de la población posee el 50% de la riqueza del mundo. En ese contexto, García Margallo dijo que "tenemos que plantear que la renta básica universal es para todo el mundo, y que la definición tiene alguna pega, como por ejemplo: ¿solo para los nacionales o los extranjeros?".

Recogía el guante la politóloga y socióloga Cristina Monge, quien aludía a la falta de datos verídicos de implantación en algún país para evidenciar la complejidad y la gran cantidad de aristas que tiene el concepto renta básica universal. "Hay que tener en cuenta que hablamos de especulaciones, nunca se ha puesto en marcha de manera generalizada. No es lo mismo que tenga una renta básica que sepa que es para tres años o que sepa que es para siempre. Estamos hablando de un concepto de innovación política, que nos inquieta", explicó. Monge matizó que, en cualquier caso, "esto no es una lógica de la ayuda sino de bienestar y derechos. Desde el punto de vista ideológico y filosófico no hablamos de ayudar a alguien, sino de una cuestión de derechos y por eso es tan difícil entenderlo".

Preguntó la moderadora cuánto costaría al gobierno. Respondió Monge que la asignación por persona sería entre 460 y 1.000 euros. Eso significaría que la carga fiscal se incrementaría en 4 puntos en España. La clave del asunto es que tiene un efecto redistributivo".

Simón intervino haciendo un breve repaso cronológico desde que se empezaron a diseñar los estados de bienestar, tras la segunda guerra mundial, recordando grandes cambios como la globalización y desplazándose hasta nuestros días, donde la capacidad de bienestar "ya no está bien diseñada". "Lo que ocurre con al renta básica, que me parece interesante, es que tiene un alto coste político detrás. Los estados de bienestar de la posguerra no tienen ya la capacidad suficiente", aseveró.

La creciente polarización de la sociedad es otro de los asuntos, uno de los principales, de hecho, que hay que tener en cuenta a la hora de abordar un análisis y un debate en torno a esta medida. Junto a este, otra clave del presente y del futuro, el asunto de la revolución tecnológica y digital que cambiará el mundo laboral. "¿Cómo hacemos la transición?, ¿cómo contribuimos a ayudar a la parte de la sociedad que lo tiene más difícil para reciclarse y volver a formarse? Necesitamos un periodo de transición y en ese período de transición hay elementos como la renta básica pueden ayudar".

Siguiendo el hilo de Monge, Marisol Rojas puso sobre la mesa el problema de la formación, y se preguntó si, precisamente en este escenario en el que hay una gran carencia, podría ayudar la renta básica universal. Respondía el exministro: "yo creo que no. Eso llevaría a que quienes ocupaban una profesión obsoleta dejen de trabajar y vivan de la renta básica universal".

"Nuestros estados de bienestar están fundados en premisas que ya no existen", apuntó Simón, quien después explicó "que las sociedades que funcionan mejor son las más igualitarias, y eso va estrechamente ligado a la justicia, que es lo que nos debería preocupar, las sociedades justas". De esta manera, el doctor en Ciencias Políticas invitaba pensar en el tridente que suponen el mercado de trabajo y la insuficiente remuneración, falta de compensación del estado ante esa carencia y, por último, la familia como provisor de bienestar, mi origen social y las habilidades que yo he heredado. La familia, de hecho, si no funciona lo otro, es lo ultimo que me queda. Y es una virtud y maldición a la vez", señaló.

Las cifras de Simón

Simón repasó algunos números: "¿la renta básica puede ayudar a esto?, políticamente es muy difícil. El 18% del PIB implicaría aplicar una renta básica. Tendríamos que tener un IRPF del 40%. Eso es políticamente inviable y ningún gobierno se va a meter, pero sí tenemos que pensar en reformar nuestro estado de bienestar".

"Debates como este que tenemos ahora se lo hacía Bismark cuando empezó a plantear la Seguridad Social", continuó Cristina Monge para arrancar otra intervención. La socióloga y politóloga afirmó que el ascensor social funcionó hasta el año 2011, y eso implicó que durante unas generaciones, independientemente de qué familia tuvieras, la sociedad te brindaba posibilidades. "Hasta que ese ascensor se paró, y se empezó a disparar el pesimismo. Es decir, necesitamos actualización política", apuntó.

Todos se escuchan, anotan, realizan intervenciones más largas de lo habitual pero no se hacen interminables. Las estructuran, buscan el contexto y concluyen con las ideas. Un debate a la altura de la complejidad del concepto, sin entrar en populismos ni argumentos gruesos; reposado y didáctico. Vivir de la renta básica universal o vivir con la renta básica universal. El elemento que puede detener la cascada de desigualdad o el elemento que puede acomodar al trabajador. Un debate sobre derechos, utopías, política y economía, resumido muy acertadamente, en forma de pregunta, por la periodista Marisol Rojas: "¿La renta básica es un instrumento para que cada uno tome las riendas de su vida?".

Manu Sola

Redactor y locutor de informativos. Se incorporó...