Javier Imbroda, artífice del gen luchador de la generación dorada del baloncesto español
Hasta el último segundo, el exseleccionador de baloncesto ha sido ejemplo de superación y solamente un cáncer de próstata del que recayó hace unos meses ha marcado el final de su largo 'partido'
Javier Imbroda (Melilla, 1961) ha muerto después de recaer en un cáncer de próstata diagnosticado por primera vez en el año 2016. Ejemplo de superación, entrega y solidaridad ha dedicado sus últimos años a servir a la comunidad andaluza como consejero de Educación y Deportes en la Junta de Andalucía, todo ello tras marcar un capítulo importante en la historia de la selección española de baloncesto. Al combinado nacional lo dotó de ese carácter competitivo y guerrero que nos llevó a lograr los éxitos de la generación dorada de este deporte.
Historia del baloncesto español
Su legado con la selección española de baloncesto es reconocido como el salto más relevante que ha logrado nuestro baloncesto, artífice del relevo generacional ue años más tarde marcaría historia de este deporte, pudo levantar en septiembre de 2001 el Europeo de Turquía y el quinto puesto en el Mundial de Indianápolis justo al año siguiente, tras vencer a Estados Unidos, algo impensable. Este salto al equipo nacional fue muy cómodo, ya que acompañó a Lolo Sanz los años previos, consiguiendo entre otros grandes logros el bronce con Lituania en los Juegos Olímpicos de 1992 en Barcelona o el bronce en el Europeo de Francia en el año 1999.
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Una historia legendaria al frente del equipo nacional que no se entendería sin su experiencia en la liga ACB. En los años 80 en Málaga, donde alcanzó grandes resultados con el recién denominado Unicaja. Sus buenos años con la selección española, le valió una silla en el banquillo del Real Madrid sustituyendo a Sergio Scariolo, no obstante, su temporada no fue la esperada y fue obligado a abandonar el barco antes de tiempo.
Alejado de los banquillos durante unos años, fue comentarista en Televisión Española (2003-06), para más tarde dirigir sin suerte en Valladolid y Menorca, que perdieron su categoría. Fue el cierre a su carrera como entrenador, con 605 encuentros dirigidos en ACB, de ellos 315 victorias. De su palmarés como técnico destaca su elección como mejor entrenador del año de la AEEB en las temporadas 1994-95 y 1998-99.
Su salto a la política
Entre 2011 y 2017 fue director de Deporte del Ayuntamiento de Málaga. Además, desde 2014 presidió la Fundación que lleva su nombre, dedicada a la atención a niños en riesgo de exclusión en Málaga, y en 2015 fundó y fue director de 'scouting' de la consultora de recursos humanos Mind Company Sport (MCS). Siguiendo los pasos de su hermano, Juan José Imbroda, que fue presidente de la Ciudad Autónoma de Melilla con el PP, en 2018 y consiguió un escaño en el Parlamento de Andalucía, como independiente, encabezando la lista de Ciudadanos por Málaga. Tras el pacto de su partido con el popular Juanma Moreno como presidente andaluz fue nombrado consejero de Educación y Deportes dentro del Gobierno regional de coalición de PP y Ciudadanos.
Entre los muchos reconocimientos recibidos se encuentran el premio Raimundo Saporta de la Asociación Española de Entrenadores de Baloncesto (2013).