Algunos lo llaman aporofobia
La Columna de Carlos Arcaya: «Algunos lo llaman aporofobia»
Alicante
Hay que partir del hecho de que todo lo que tiene que ver con los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Alicante es una carrera de obstáculos desde que al frente de la Concejalía se encuentra Julia Llopis. No es fácil para los ciudadanos más vulnerables ni para los colectivos que trabajan con estas personas ni para otras administraciones.
Al margen de los pocos reflejos a la hora de activar el dispositivo de frio para personas sin hogar -con la que está cayendo estos días-, la última prueba la tenemos con la reacción tardía del equipo municipal ante la propuesta de la Generalitat de destinar 500.000 euros, precisamente, para construir un albergue para este tipo de situaciones.
La contrapropuesta municipal ha llegado cuando prácticamente expiraba el plazo que el Consell dio al consistorio alicantino para aceptar una inversión incluida en los presupuestos participativos del Gobierno autonómico.
Y la alternativa parece razonable: el medio millón de euros es insuficiente para construir un nuevo albergue, pero no para adecentar alguna de las instalaciones que ya tiene el Ayuntamiento. Pero, la pregunta es por qué nuestro consistorio lo lleva todo a los extremos; por qué ha perdido un tiempo precioso en contestar. Luego, algunos les acusan de aporofobia.