Ovejas y cabras pastando en Barcelona: berridos y cencerros contra los incendios

Barcelona

Berridos de fondo. Sonido de cencerros. Cabras con sus cuernos, ovejas con su lana, el pastor con su bastón, un perro controlando el rebaño. No estamos en el Pirineo, tampoco en la Cataluña interior ni en una zona agrícola de la costa. Distrito de Horta - Guinardó. Barcelona. Una estampa bucólica en medio de la capital catalana. Al lado del rebaño pasan ciclistas, coches con jóvenes - sobre todo parejas - que van al mirador, y también motoristas que aprovechan las curvas para poner a prueba sus vehículos. ¿El motivo de esta postal tan extraña? Los incendios forestales que han castigado la zona los últimos veranos.

El Ayuntamiento ha empezado hoy un plan piloto para luchar contra los incendios, coordinado con el Consorcio del Parque de Collserola para hacer lo que se conoce como "pastura preventiva". Es sencillo: las ovejas y las cabras comen masa forestal que podría ser muy inflamable si se declara un fuego, y de ese modo contribuyen a que no se propaguen las llamas. La prueba ha empezado en el Mirador de Montbau, va a durar tres meses (hasta junio) y si tiene éxito se replicará en los otros distritos de Barcelona que limitan con la montaña: Nou Barris, Gracia y Sarrià-Sant Gervasi.

El rebaño y la ciudad

No hay rebaño sin perros, aquí hay tres. Uno ha ladrado un par de veces para guiar al ganado, pero los otros descansan perezosamente al sol. Son las 4 de la tarde y el rebaño está tranquilo, comiendo vegetación, pastando sin prisa. Un cabrito pequeño busca a su madre para amamantarse. Todas las cabezas de ganado vienen de Sant Llorenç, a 40 kilómetros de Barcelona, y han llegado hasta la ciudad en un camión de 16 metros.

"Que hagan las fotos que quieran, pero lo que no hay que hacer es tocar a los animales o perseguirlos. Si tienen perros, que los aten. Y si tienen dudas, que pregunten al pastor. Yo estoy encantado de hablar con todo el mundo, lo peligroso es el desconocimiento, a veces tenemos buena fe... pero la cagamos. Que la gente pare y pregunte."

Ampliar

El Ayuntamiento cree que todo el mundo sale ganando con el proyecto. Según el concejal de Emergencia Climática, Eloi Badia, el cambio de temperatura del planeta obliga a buscar soluciones creativas para controlar el medio ambiente. "Estamos intentando que nos ayuden a tener controlado el sotobosque, para controlar a su vez los posibles fuegos", remataba el edil.

De momento, los animales dormirán en la zona electrificada en el antiguo campo de fútbol de La Font del Gos, en Horta. Habrá 4 espacios para comer y dos abrevaderos para alimentar el ganado. 135 ovejas, 80 cabras, 70 corderos y 10 cabritos.