El Almería tiene un problema con el gol en casa

Ha llegado la hora de muchas cosas en el Almería de Rubi. La Liga ha entrado en su recta final donde no hay marcha atrás y cada fallo podría ser clave para aquellos que buscan el sueño del ascenso a la máxima categoría del fútbol nacional. El proyecto rojiblanco del ministro saudí, que ha estado 29 jornadas en ascenso directo de las 34 que se han celebrado en el Campeonato Nacional de Liga en Segunda División, no quiere fallar en el momento clave del curso en el fútbol de plata, donde se deciden las dos plazas de ascenso directo a la élite del fútbol.

El Almería completó una primera vuelta de la Liga de cine, siendo de Primera División en la mayoría de las jornadas, pero aquello es historia, no vale para conseguir el objetivo del ascenso. Ahora hay que corregir y afrontar cada partido como si fuera el último sumando el mayor de puntos posible en las ocho jornadas, ocho finales que quedan en la categoría de plata del plata. Concentración

Es la hora de ganar, ganar y ganar, y si es corrigiendo mucho mejor. Y en ese sentido, una de las cosas que debe corregir el Almería de Rubi es el tema de los goles encajados en los últimos partidos en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, donde se pasó a marcar a recibir goles con bastante facilidad, aunque también es cierto que el conjunto almeriense va muy bien en cuanto a puntería. Le hacen tantos, pero también marca, pero siempre será más fácil ganar los partidos en esta categoría tan complicada dejando la portería a cero; eso, además, siempre es un plus para los que equipos que ganan los encuentros en esta categoría tan igualada.

El Almería debe ganar sí o sí a la Ponferradina este lunes, a las 21:00 horas, en el Estadio de los Juegos Mediterráneos y si es dejando la portería a cero, mejor, porque los rojiblancos no han estado muy finos en los últimos cuatro encuentros en el recinto deportivo de la Vega de Acá, donde han recibido en total seis goles.

El Lugo hizo tres goles en Almería, mientras que Mirandés, Fuenlabrada y Girona hicieron un tanto cada uno. En cambio, el Almería en esos cuatro partidos marcó ocho goles. Rubi busca el equilibrio para las últimas ocho jornadas en las que se decidirá el futuro del proyecto del Almería en el tercer año del ministro en el Almería.