Zelenski advierte que la semana será "tensa" con operaciones rusas en el este
El presidente ucraniano asegura que Rusia intenta acusarles de los actos que las tropas rusas "obviamente han cometido"
El presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, este sábado. / Anadolu Agency
KIEV
El presidente de Ucrania, Volodomir Zelenski, ha advertido en la madrugada de este lunes, cuando se cumplen 47 días desde el inicio de la invasión rusa, que la semana que comienza será "tensa" en el este del país porque "las tropas rusas se trasladarán allí para continuar sus operaciones".
El presidente ucraniano ha afirmado que el ejército ucraniano "se está preparando para la respuesta" y que redoblará sus esfuerzos para que se le suministre a Ucrania más armamento, continuará su actividad en el ámbito internacional. "Seremos aún más activos en el campo de la información", ha dicho.
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"La próxima semana no será menos importante que las anteriores. Será igual de tenso y tendremos que ser aún más responsables", ha añadido Zelenski.
El presidente ucraniano, quien este domingo ha mantenido una conversación telefónica con el canciller alemán Olaf Scholz, ha destacado la importancia del despliegue diplomático: "Desarrollamos nuestras relaciones con los socios. Recibimos ayuda. Aseguramos la máxima atención del mundo a nuestras necesidades".
El objetivo es "influir en el debate mundial y proponer y promover nuevas sanciones contra Rusia", según el presidente ucraniano, para quien se está "haciendo todo lo posible para llevar ante la justicia" a los responsables rusos que "torturaron a nuestro pueblo, destruyeron nuestras ciudades y nos saquearon".
Zelenski ha asegurado que Rusia solo "se está justificando y negando" y que está tratando de desviar la responsabilidad de sus actos "acusándonos de cometer lo que las tropas rusas obviamente han hecho".
Se ha referido en concreto a los "asesinatos en Bucha" y al ataque con misiles en Kramatorsk, donde el viernes murieron 50 personas y otras 87 resultaron heridas en un ataque a una estación en la que se encontraban casi 4.000 civiles que querían huir de la zona.
