El adoquín por la memoria se estrenará en Busturia
En mayo, el Ayuntamiento y Gogora colocarán una placa Stolpersteine en memoria de Angel Lekuona, fusilado el 10 de abril de 1945, cuando era prisionero en Hraistko, un campo de concentración del Tercer Reich, tras ser deportado desde Francia, donde se había exiliado tras la Guerra Civil. En Radio Bilbao, hablamos con el coordinador de esta investigación sobre el origen de una búsqueda que culmina en el reconocimiento
En la actualidad, hay más de 79.000 baldosas en memoria de los muertos por deportación en 25 países europeos. En Euskadi, el municipio bizkaino será el primero en colocar una, en el mes de mayo, y le seguirá en junio Barakaldo, que ya se comprometió a colocar en su caso seis placas conmemorativas. El caso de Busturia tiene que ver con Angel Lekuona, natural del municipio y que fue fusilado en un campo de concentración del Tercer Reich. Sus restos se han conservado en el memorial del cementerio de Praga, junto con los de otros prisioneros asesinados, gracias a los encargados del crematorio, que los guardaron y documentaron en su momomento. Esta semana, las familias de las víctimas han viajado a Praga donde el Ayuntamiento, los responsables del cementerio de Strasnice donde se ubica el memorial de víctimas, y el grupo de trabajo para la preservación de la memoria de los deportados del campo de Hradischko han impulsado un acto de memoria y reconocimiento.
Las cenizas de Angel Lekuona seguirán reposando en el memorial del crematorio civil de Stranice, en Praga. Su familia ha llevado hasta allí la tierra de su lugar de nacimiento, el caserío Apraize, del barrio de Altamira de Busturia. En mayo, el Ayuntamiento de Busturia y Gogora colocarán en el propio municipio una Stolpersteine, con el nombre y la fecha de nacimiento y muerte de Angel Lekuona, una iniciativa que trata de mantener viva la memoria de los muertos por deportación. El origen de su llegada a Busturia tiene que ver y mucho con el inicio de una investigación, que coordina Unai Egia. Hoy acompaña a la familia de Lekuona en Praga y es partícipe de que se recuerde a otras seis personas, con quienes fue contactando en su búsqueda. Un trabajo lleno de casualidades y que se inició tras su lectura del libro "El impostor", de Javier Cercas.
Unai Egia: "El origen de esta investigación comenzó con el libro de Javier Cercas"
En 2020, Gogora, el Instituto de la Memoria, la Convivencia y los Derechos Humanos, publicó una investigación sobre los deportados vascos a los campos del Tercer Reich (1940-1945). En esa investigación se recoge que 253 personas fueron deportadas, 113 murieron y 125 salieron con vida. Se desconoce que les sucedió a otras 15. Solo en Mauthausen exterminaron a dos terceras partes de todos los vascos que murieron en la deportación.