Uno de cada tres menores de edad vitorianos asegura que su estado de ánimo es peor desde la pandemia
Según una encuesta realizada en el marco del segundo estudio diagnóstico de la situación de la infancia y la adolescencia.
Vitoria
El 35,2% de los menores de edad vitorianos considera que su estado de ánimo ha empeorado durante la pandemia y el 30% se siente irritable, irascible y con bajo estado de ánimo con más frecuencia, según el segundo estudio diagnóstico de la situación de la infancia y la adolescencia en Vitoria.
De cara a elaborar el III Plan de Infancia y Adolescencia, el Ayuntamiento de Vitoria ha realizado una encuesta a un millar de niños, niñas y adolescentes para conocer su situación socioeconómica y anímica. Entre los datos extraídos, resulta alarmante el empeoramiento del estado de ánimo y el rendimiento escolar de los niños, niñas y adolescentes, aunque se puede apreciar una evolución positiva en cuanto a la pobreza, que ha disminuido del 19,6% al 13,4% entre los años 2016-2020.
Uno de los efectos negativos que la pandemia ha tenido en los menores ha sido en el ocio y en el tiempo libre. Ha aumentado la preferencia por el ocio doméstico y 4 de cada 10 niñas, niños y adolescentes afirman pasar más tiempo que antes de la pandemia delante de las pantallas y utilizando las redes sociales. El 90% de los menores ha trasladado que cree que puede contribuir a mejorar la ciudad, pero la mitad de los encuestados siente que no se le escucha y no se toma su opinión en consideración.
En estos cuatro años ha aumentado la diversidad familiar: "uno de cada cuatro menores convive en una familia diferente a la tradicional; por ejemplo, monoparental, con dos madres o con dos padres", ha explicado Idoia García, técnica del Servicio de Información e Investigación Social (SIIS).
De los 44.249 niños, niñas y adolescentes que residen en Vitoria, más de la mitad lo hace en 4 barrios: Zabalgana, Arriaga-Lakua, Salburua y Sansomendi.
Estos datos definirán las líneas de acción del III Plan de Infancia y Adolescencia, que serán principalmente mejorar la participación, mejorar la inclusión de menores con diversidad funcional, aumentar la oferta cultural y de ocio y promover estilos de vida saludables.