La linarense Cristina Mata participará en el Open Nacional de Tenis en Silla de Ruedas de Almussafes

Linares

Ella es todo un ejemplo de superación. La linarense Cristina Mata, de 45 años de edad, sigue demostrando que existen las segundas oportunidades. Pertenece al Club de Tenis Linares y, en la actualidad, compite en la Liga MAPFRE de Tenis en Silla de Ruedas. Tras su paso por el torneo de la localidad de Marbella, donde arrancó la competición, la tenista hará su próxima parada en tierras valencianas, en concreto, en la localidad de Almussafes.

Es allí donde se celebra una nueva edición del Open Nacional de Tenis en Silla de Ruedas, prueba para la que se ha estado preparando a conciencia y, como ha contado en los micrófonos de SER Deportivos Linares, con la intención de hacer un buen papel porque "es la primera vez en la historia del deporte español que hay un cuadro femenino en Tenis Silla, así que esto depende de mi participación para que continúe".

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Con más ganas que nunca de hacer deporte y, por supuesto, Tenis, la deportista ha revivido en Radio Linares el duro trance por el que tuvo que pasar hasta poder competir en esta disciplina. Cristina Mata sufría un grave accidente en El Yelmo cuando practicaba parapente, hecho que se remonta al año 2017. Algo falló en su salto, acabando por chocar contra el suelo a una altura de unos 30 metros.

Después de las tediosas intervenciones quirúrgicas y las numerosas sesiones de rehabilitación, Mata vuelve a lucir la mejor de sus sonrisas y hasta recuerda, con buen ánimo, que lo primero que le preguntó al personal sanitario que le atendió "fue si podría volver a jugar al Tenis". Pese a los daños sufridos, la tenista no ha llegado a perder la movilidad total en las piernas, si bien, debe competir en silla de ruedas. "Aún me queda mucho, pero he ganado mucha musculatura y, mientras, sigo compitiendo para mejorar aspectos como el saque o el revés".

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"Hay que hacer deporte y más deporte. Mejora nuestro estado de ánimo y la capacidad física, además que sirve para conocer a persona amables, entusiastas y positivas. Te ríes con los compañeros, porque reírte de tu problema es la mejor cura para normalizar tu situación", explica Cristina Mata, que invita a todas las personas que hayan pasado por una situación similar a que nunca dejen de hacer ejercicio físico y, si pueden, competir.