El descenso de subvenciones de Sanidad hace peligrar la viabilidad de asociaciones de enfermos y pacientes
Son entidades que atienden y apoyan a enfermos de cáncer, paralásis cerebral o alzheimer, entre otros. Se ha pasado de 350.000 euros a 150.000 en 2022
Hombre en silla de ruedas / Peter Dazeley
Zaragoza
De 350.000 a 150.000 euros. Es el notable descenso que sufre el presupuesto que el Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón va a destinar este año a subvencionar la labor que realizan entidades como AZAJER, Amac - Gema, Aspanoa o ASPACE.
Todas ellas colaboran en la atención de enfermos y llegan donde la administración no puede llegar, como adicciones, atención a pacientes de cáncer de mama o infantil o parálisis cerebral. El aumento del coste de la energía, la inflación y el descenso de las ayudas hace temer, en algunos casos, por su supervivencia
Son unas 80 asociaciones las que suelen concurrir. Aunque entienden el esfuerzo llevado a cabo por el Gobierno de Aragón durante la pandemia, también denuncian el aumento de las necesidades sociales debido a la covid.
Ludopatía
Miriam Gañán, secretaria de la Asociación Aragonesa de Juegos de Azar en Rehabilitación (AZAJER), señala que "la ludopatía es una vía de escape, que no les hace pensar, que les hace sentirse bien", y "nos están llamando familias que están totalmente destrozadas, que no saben por dónde salir".
"Estamos viendo un aumento en el abuso de las nuevas tecnologías durante la pandemia".
Parálisis cerebral
ASPACE se dedica a la intención de los enfermos con parálisis cerebral. A su cargo tienen 84 enfermos. Ahora se sienten ahogados. Su directora gerente, Mónica Iglesias, explica que "hemos triplicado la factura de la luz, son cifras muy importantes".
Por eso, "cualquier tipo de subvención se vea reducida la cuantía es muy preocupante para todos, y lo veíamos venir porque había bajado el presupuesto de acción social en general", continúa Iglesias.
El descenso en la cuantía hace, además, que la convocatoria incluya otra condición, las subvenciones no pueden superar los 15.000 euros anuales. "Lo que nos estamos temiendo las entidades es que estamos viendo señales de que esto va a ser así durante todo el año", afirma Mónica Iglesias.
Asociaciones que atienden a pacientes con cáncer, con Alzheimer o diabéticos notarán un fuerte descenso en los ingresos que les permiten realizar su labor.
