500 oficinas y 2.000 trabajadores menos en el sector bancario de la Comunitat Valenciana: una sangría que no ha terminado

Valencia

En el último año se han cerrado más de 500 oficinas bancarias en la Comunitat Valenciana y se han perdido 2.115 empleos, alrededor del 10% de los 20.000 trabajadores del sector financiero en nuestra autonomía. Comisiones Obreras alerta, por un lado, de que esta reducción de oficinas y personal no ha terminado, y por otro, del empeoramiento en las condiciones de trabajo que está empezando a afectar a la salud laboral.

Y es que en los últimos meses se ha dado, como explica el portavoz del sector financiero en Comisiones Obreras, Jorge Galán, la tormenta perfecta: la digitalización, la pandemia y las fusiones han hecho que se reduzcan la plantilla y el número de oficinas. Un fenómeno generalizado pero que se nota más en las entidades más grandes, Banco Sabadell, Caixabank, Santander y BBVA. El resultado, según los datos que ha recopilado el sindicato, el cierre en los últimos doce meses de 507 oficinas, y la pérdida de 2.115 puestos de trabajo. Y los que mantienen su empleo, lo hacen en peores condiciones, con más presión comercial y menos tiempo para atender a sus clientes.

El resultado, más ansiedad, más problemas relacionados con el estrés y la salud mental. Además, el empleado se convierte en la cara de la entidad y es el que recibe las quejas por parte de los usuarios, que han visto como disminuye la atención que reciben como clientes. Tanto es así, que algunas entidades recurren ya a contrataciones temporales, lo que según Jorge Galán, les da la razón, los recortes de plantilla han sido excesivos.