De quemar una suite a acabar confinados por la COVID: Carmen Machi, Quim Gutiérrez y su caótica experiencia rodando en Isla Mauricio

Madrid

Carmen Machi y Quim Gutiérrez han visitado este miércoles El Hormiguero para presentar Amor de madre. Una película, que llegará este mismo viernes a la plataforma de vídeo en streaming Netflix en la que los actores interpretan a una madre y a un hijo que acaban yéndose juntos de luna de miel después de que el personaje de Quim Gutierrez reciba un plantón en el altar. Una situación que traslada la historia hasta la paradisíaca Isla Mauricio, donde se desarrolló el rodaje de una cinta que vivió todo tipo de contratiempos como consecuencia de la pandemia de la COVID-19.

Así lo han dado a conocer tanto Carmen Machi como Quim Gutiérrez, quienes le han contado a Pablo Motos cada uno de los sucesos que llevaron a la película a retrasar su estreno. Y es que, tal y como han explicado los actores, el rodaje comenzó justo antes de la pandemia de la COVID-19: "Estábamos rodando en Isla Mauricio y comenzamos a escuchar que había llegado una cosa a Europa que era la COVID-19". A continuación, el actor le pedía al presentador que retrocediera al mundo prepandemia para entender que ellos estaban viviendo una realidad paralela mientras el mundo hacía frente a la enfermedad: "Vas a Isla Mauricio, ensayas y, cuando acabas de rodar, pones los pies en la arena".

Netflix tuvo que parar el rodaje por la COVID-19

Tras varios días de rodaje, el equipo comenzó a ver que el mundo empezaba a cerrarse para evitar la propagación de la COVID-19: "Y tú estás en el paraíso mientras hay una incertidumbre inmensa". Y es que, a pesar de que estaban en una isla paradisíaca, comenzaron a recibir noticias de amigos y familiares que estaban ingresados por el brote de coronavirus. Esto llevó a Netflix a fletar un avión para permitir que el equipo de la película pudiera reunirse con su familia y allegados. A pesar de que dejaron la película a medio hacer, estos acabaron retomando la grabación en Tenerife.

Sin embargo, los actores han querido centrarse en lo que pasó en Isla Mauricio porque dejó muchas anécdotas para contar. Apenas unos días después de llegar a la isla, el equipo quemó una suite del hotel por completo. Algo que sorprendía a Pablo Motos, quien no daba crédito ante lo que podía haber pasado en ese hotel: "Luego nos quejamos de los ingleses que vienen a Magaluf".

El equipo quemó una suite y acabó aislado por la COVID-19

Pero la cosa no daba ahí. Tal y como recuerda Carmen Machi, las actrices Justina Bustos y Yolanda Ramos llegaron a la isla con la COVID-19. Algo que llevó a establecer un estricto aislamiento tanto para las actrices afectadas por la enfermedad como para el resto del equipo, quienes tuvieron que pasar varios días encerrados en el hotel con todo tipo de islas paradisiacas a su alrededor: "El equipo mauriciano no querían rodar con nosotros. Estuvimos encerrados en la habitación y nos dieron la comida con el palo".

Dado que estaban completamente encerrados, los miembros del equipo se comunicaban por teléfono y hacían fiestas por Zoom. Allí curioseaban sobre la comida que les había tocado en el hotel y incluso negociaban posibles cambios. De hecho, Carmen Machi reconoce que llegó a odiar la palmera que tenía delante de su habitación. Y es que, a pesar de que estaban en una isla paradisíaca, no pudieron disfrutar de la misma: "Fue un infierno en el paraíso". Sin embargo, el equipo pudo retomar el proyecto en Tenerife, donde pudieron terminar de grabar la película para que, un año más tarde, llegue a la plataforma de vídeo en streaming Netflix.