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El Ayuntamiento de València abre expediente sancionador al puerto por vertidos de ácido sulfhídrico

La Autoridad Portuaria se enfrenta a una multa de 3.000 euros, que podrían ser más si se demuestra reiteración

Puente de Astilleros de València / Google Maps

València

El Ayuntamiento de València ha abierto un expediente sancionador a la Autoridad Portuaria de València por vertidos en la red de saneamiento de la ciudad. Valenciaport se enfrenta a una multa de 3.000 euros, una cantidad que podría ser superior si se demuestra que ha habido reiteración en esos vertidos.

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La historia arranca a finales del año pasado cuando la Asociación de Vecinos de Natzaret denunció al Ayuntamiento la existencia de olores fuertes en la zona más cercana al puerto junto al puente de Astilleros. Tras esa denuncia el Ciclo Integral del Agua realizó varias mediciones en las que se constató la presencia de gases con altos niveles de ácido sulfhídrico.

En las instalaciones de la conselleria de Agricultura que hay en esa zona también se realizaron mediciones donde también se registraron esos olores procedentes de gases nocivos. Tras comunicarlo al puerto, y como se constató en las mediciones periódicas los niveles de ácido sulfhídrico fueron desapareciendo hasta que de repente a mediados de marzo de este año volvieron a detectarse altos niveles de este compuesto químico.

Como esas mediciones realizadas por el Ciclo Integral del Agua y por la conselleria de Agricultura no son válidas para la apertura de un expediente sancionador el Ayuntamiento contrató los servicios de un laboratorio homologado. Varios días antes se informó al puerto de que se iba a realizar esa medición a finales de marzo, pero entonces los valores de ácido sulfhídrico fueron cero.

No obstante, la vigilancia permanente del Ciclo Integral del Agua volvió a detectar pocos días después ácido sulfhídrico, con lo que se decidió volver a contratar al laboratorio, pero se citó al puerto sólo con unos minutos de antelación. Fue este 20 de abril cuando los técnicos homologados pudieron constatar la presencia de esos gases que, al parecer, vienen de vertidos que se cuelan de la red de saneamiento interior del puerto.

Con esa prueba el Ayuntamiento de València ha abierto expediente sancionador a la Autoridad Portuaria que se enfrenta a una multa de hasta 3.000 euros. Una cantidad que, en virtud de la Ley de Aguas, podría ser superior si se demuestra que ha habido reiteración en esta conducta negligente.

 
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